Drama Queen

Capítulo 42: Punto Final

Capítulo 42: Punto Final

Talor…

 

 

Tábata y papá tuvieron un accidente ayer, fueron llevados al hospital, papá tenía un brazo roto pero nunca se dio cuenta, Tábata se lesionó el cuello pero estarán bien los dos. Mientras tanto, toda la madrugada estuvimos en el hospital mamá, Peyton, Lenny y yo. Mamá no dejaba de reír porque papá se había roto el brazo y no se dio cuenta, y es que a la manera en que ella ve las cosas le pareció gracioso que hasta tenía el hueso de por fuera. Papá dijo que estaba tan preocupado por Tábata que no se dio cuenta y eso puede ser verdad, pero eso no le quita lo gracioso.

 

Así que mientras mi hermana y mi padre estaban siendo atendidos, los muy cínicos de mi madre y yo nos la pasamos haciendo chistes o burlándonos del accidente que ellos tuvieron, mamá no dejaba de decir que por eso no usaba tacones y luego comenzó a cuestionarse a quién rayos se le puede atorar el tacón en el acelerador, también nos parecía gracioso que la primera vez de Tábata al volante haya caído de un barranco al bosque, quiero decir, eso ya es tener muy mala suerte, Dios no puede haberle dado ésa suerte, a lo que mamá dijo que pareciera que antes de salir de casa tomó un baño de sal.

 

Mamá y yo soltamos las carcajadas con cada cosa que se nos ocurría, Lenny sólo se reía cuando nos burlábamos de papá pero no de Tábata, y a Peyton se le dificultaba tanto ignorar nuestros chistes crueles, porque soltaba una risita de manera discreta cada que encontraba algo gracioso.

 

 

-          Talor, ¿recuerdas el meme de un chico vestido de nerd que tiene muy mala suerte? – me preguntó mamá y yo asentí – bueno, deberíamos poner la cara de Tábata y con letras “Maneja por primera vez en su vida…Se tira de un barranco a los 5 segundos” 

 

 

 

Soltamos las carcajadas, menos Lenny, él estaba enojado de que hiciéramos ésos chistes.

 

 

Como a las 7 de la mañana nos dijeron que en una hora ya iban a salir Tábata y papá. Entonces mamá se puso de pie, cargó a Lenny que estaba dormido y nos susurró a Peyton y a mí:

 

 

-          Tengo que darle de desayunar a Lenny, no debe tardar en despertar. Le hablaré a Joseph para que manden un auto de la estación para Harry y Tábata.

-          ¿Entonces para qué nos quedamos toda la madrugada aquí? – preguntó Peyton.

-          Para quedar bien con mi marido y mi hija, aparte no me gusta manejar de noche.

-          Sinceramente no sé qué decir – dijo Peyton.

 

 

Nosotros cuatro regresamos a casa. Y mientras mamá hacía el desayuno me bañé, me vestí y salí de la casa de manera silenciosa.