Cuatro| 腰抜け

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⚠️ADVERTENCIA: MANGA SPOILERS ⚠️

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腰抜け

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腰抜け



Aki no durmió esa noche. Se quedó mirando en la cama vacía en donde supuestamente debería estar Kichirou. Los días pasaron bastante rápidos. No supo cuantos fueron exactamente. Se sentía angustiada y bastante aterrada desde que vio, al reverso de la carta que le habían dado en el orfanato, una dirección.


    — ¿Una dirección? Entonces te dieron su ubicación, ¿no es así?.— cuestionó el oficial; Aki negó con la cabeza.

    — Solo decía Hosu y una fecha— relató la azabache— No decía nada más.

    — ¿Por qué no le dijiste a alguien? Una forma de autoridad te hubiese ayudado.

    — No— replicó aumentando su tono de voz—. Si lo hacía ponía en peligro la libertad mía y la de Kichirou. Además de que ellos esperaban que lo hiciese.


Aki miró de soslayo la dicha carta que tenía al lado. Ni había visto otra cosa que no fuese esa maldita carta. La tomó entre sus manos con delicadeza y verificó la fecha en donde supuestamente debía estar en Hosu. Era ese mismo día. Al volver a leerla por milésima vez una ataque de furia la invadió, frunció el ceño y con toda la energía que tenía arrugó la hoja en una bola de papel y la aventó hacia la pared. Pateó un bote de basura que tenía cerca, y justo en ese momento más hojas de papel arrugadas cayeron al suelo.

Se dejó caer contra la pared hasta que topó con el suelo, tomándose el cabello con desesperación, una lágrima cayó por su mejilla. Estaba bastante cansada y molesta consigo misma, solo quería ver a Kichirou sano y salvo. Que estuviese ahí junto a ella como siempre lo había estado.

No tenía de otra. Tenía que ir a Hosu.

Así que calmándose e inhalando y exhalando aire se levantó y dirigió hacia su mochila, donde guardó una sudadera y barras de granola para el camino, se la colocó en la mochila y fue hacia la puerta. Se detuvo antes de salir, admirando el lugar donde había vivido bastantes años. Bajo la cabeza, rindiéndose ante la ausencia de otro individuo junto a ella; se subió la capucha de la sudadera y apagó la luz, dejando aquella habitación completamente a oscuras.

LADRONA » BNHAWhere stories live. Discover now