I'ᴍ ɢᴏɪɴɢ ᴛᴏ ᴋɪss ʏᴏᴜ. I ᴍᴇᴀɴ ɪᴛ!/ SᴜᴘᴇʀCᴏʀᴘ / AU

22-

Kara tamborileó con los dedos contra el guión. Sentada en su rincón del rodaje, con las páginas en su regazo, trató de concentrarse en lo que venía. Finalmente, estaba de vuelta en el trabajo, finalmente, estaría viendo a Lena, y finalmente ... En realidad, eso era todo en lo que podía concentrarse.

A su lado, Winn parloteaba a un millón de millas por hora, aparentemente acababa de ver las inserciones de Meltie en el guión. –Bueno, supongo que la broma es nuestra–. Él dijo. –Sabías lo que estabas haciendo desde el principio.

–¿Qué quieres decir?– Kara miró hacia arriba.

–Cuando improvisaste acerca de que Tierz conocíera a Lauren, pusiste todo esto en marcha–. Hizo un gesto hacia el guión. –Qué recompensa. ¿Has visto los ratings? Mi manager está en el cielo.

–Oh, sí–, coincidió Kara. Era mejor si no se entendía que este no había sido su gran plan maestro.

–¿Estás nerviosa? ¿Sobre tener que besarla?

–¿Hmm?– Kara se centró en Winn correctamente. Cierto. Todavía no era de conocimiento público sobre la película. ¿Estaba nerviosa? Un poco. No como antes. Esta vez estaría besando a una mujer que sabía que también le gustaban las mujeres. Una mujer que había insinuado que Kara podría tener una oportunidad con ella, si su corazón no perteneciera a otra parte. Una mujer que sabía que Kara se sentía atraída por ella. Eso cambió su dinámica anterior de muchas maneras.

–Estaría tan nervioso que estaría tirando mis galletas ahora mismo–. Winn se rió. –No tengo ni idea de cómo podrías tocar a la perra y mucho menos ponerle la boca encima.

Los dedos de Kara se tensaron. –No la llames así. Ella no es una perra.

–¿Qué?– La sorpresa cruzó el rostro de Winn. –Todos lo hacen.

–No me importa. Nombra una cosa perra que te haya hecho personalmente a ti o a alguien por aquí.

–Whoa ... lo siento–. Él levantó sus manos. –Sin ofender. Estoy acostumbrado a que ese sea su apodo. Ni siquiera la conozco.

–Nadie lo hace y, sin embargo, todo el mundo piensa que está bien hablar mal de ella. ¿Qué te parece?

–Tienes razón, no lo es–. La mirada de Winn se volvió especulativa. –Entonces ... ¿ustedes son amigas ahora?

Kara se encogió de hombros y pasó la página, fingiendo prestarle atención al guión. –Hicimos una película juntas durante la pausa. Ahora la conozco mucho mejor. Ella es muy buena.

El silencio se prolongó y finalmente Kara se encontró con los ojos muy abiertos de Winn. –¿Qué? ¿Hiciste una película con ella?

–Sí. Es una gran actriz. Aprendí mucho–. Y ella me besó como si estuviera en llamas y me abrió el corazón. Pero no quiso hacerlo, así que ... –Fue educativo.

–Caray, eres valiente. Todo el mundo aquí está demasiado asustado para hablarle, ¡y tú has estado haciendo una película con ella! Y ahora...– Winn le dio un codazo. –Besarás a Tierz–. Winn se estremeció. –No, todavía no puedo imaginarme haciendo eso.

–¿Interrumpo?– La voz fría de Lena cortó el aire y Winn casi saltó de su silla.

–¡No!– Winn se apresuró a ponerse firme. –Solo estábamos ensayando. Me tengo que ir–. Dijo y salió disparado.

–¿Siempre es tan asustadizo?– Lena se sentó en el asiento de lona vacío. –¿Puedo saber de qué estabas discutiendo?

–Depende. ¿Cuánto escuchaste?