Poco probable (Maya y Carina)

Capítulo 15

Nos detenemos frente al hotel donde se celebra la cena, el chofer nos ayuda a salir del auto, Carina me da la mano y entramos, el lugar tiene una decoración bastante elegante, así que me siento más tranquila, de no haber escogido el vestido blanco, sería la comidilla de todos los doctores.

-Aquí vamos- susurra Carina luego de tomar una bocanada de aire.

Se que está nerviosa, esta es la prueba final para el éxito de su estudio, si todos los aquí presentes se llevan una gran impresión, tendrá posibilidades de realizar su estudio por un par de años, como ella desea, sería un gran avance científico.

Caminamos por el salón, donde hacemos saludos ocasionales y charlas deliberadas con varios de los presentes, tomamos un par de copas de vino blanco, mientras me explica quien es cada uno de los que la saludan.

-Buenas noches señoritas- gíramos para encontrar con un galante señor Presley.

-Hola señor Perry ó ¿me equivoco?- tomo la iniciativa de hablar con él, por lo que me dijo Carina en la habitación.

-Presley, veo que no me equivoqué-

-¿En qué?- veo cómo Carina disimula una sonrisa, mientras bebe un trago de la copa.

-En pensar que serían las más hermosas de la fiesta, espero y me concedan un baile al menos-

-Muchas gracias por su halago, usted también se ve muy elegante, si no fuera por esta mujer a mi lado, usted sería mi primera opción de la noche- se como tratar este tipo de hombres egocéntricos y ni en sus sueños más retorcidos dejaría a Carina en manos de él -pero tendré que romper su ilusión, ya que he prestado durante toda una semana a está maravillosa mujer, es mi turno de disfrutarla y no pienso compartirla con nadie, por lo menos hoy-

La expresión de Presley se vuelve sería, al entender lo que le he querido decir, la Italiana nota la tensión y trata de minimizar el impacto.

-Sabe señor Presley, mi novia es ganadora del oro olímpico de Londres 2012 en los 10,000 metros planos- el cambia su atención a Carina, noto cierto asombro en su rostro al escuchar lo de mi medalla - ella no me cree pero yo siempre le he dicho, que lo que me enamoro fue esa medalla, nada más, no todos tenemos el placer y el honor de salir con un campeón olímpico-

Presley entiende, que no tiene ya más nada que hacer con nosotras, se logra escuchar como se quiebran sus ilusiones, de pasar un buen momento con nosotras, la conversación se vuelve bastante técnica respecto a lo del estudio de Carina y las donaciones.

-Bueno me disculpo debo saludar a otras personas, estamos en contacto doctora DeLuca y un gusto conocerla señorita-

-Claro que si señor Presley-

-El placer es mío señor- le extiendo la mano y le doy un apretón de mano.

El hombre se retira, así que volvemos a quedar la italiana y yo saludando de forma arbitraria a varios invitados, escuchamos como el anfitrión contratado nos da la señal para entrar al restaurante y poder iniciar con la cena, creo que el director del hospital de New York y Carina deben decir unas palabras, así que nos dirigimos hacia la lista de invitados y ubicamos nuestra mesa, ya en ella, yo tomo asiento, con la morena a mi lado.

-¿Sabes lo que vas a decir?- preguntó mientras le limpio el saco negro de pelusas inexistentes.

-Si, daré las gracias por el apoyo y esas cosas, no quiero alargarme mucho porque todos debemos tener hambre- le sonrío.

-Me parece perfecto- un camarero se acerca a ella y le hace señales de que ya es el momento de que suba al escenario- todo va a salir bien- me pongo de pie con ella y arreglo su traje, luego le doy un pequeño beso en los labios y le sonrío con ternura para que no esté tan nerviosa -eres la mejor y lo sabes- le doy un fuerte apretón en las manos para darle más confianza.