𝐏𝐚𝐥𝐨𝐦𝐚 𝐈𝐈𝐈; 𝐓𝐑𝐔𝐄𝐍𝐎

12

1/3

NARRA PALOMA

Te amo más que a nadie en éste mundo, Paloma.

¿Cómo carajo puede ponerme el mundo al revés con una simple frase? Me está haciendo dudar de todo lo que había estado pensando hasta ahora.

- Tengo que irme Mateo. —le dije al ver el coche de Zeus acercándose al suyo.

- Necesito una respuesta, no me dejes así por favor. —suspiró profundamente.

- Tengo que pensar bien las cosas. Me mentiste y sabes que es lo que más odio en éste mundo. —le dije seria.

- Lo sé, te dejaré todo el tiempo que necesites. Solamente te ruego que me digas si aún sientes algo por mí o no, no puedo seguir así.

No Paloma, cómportate por una vez en tu vida como se debe.

- Que tengas buenas tardes. —le dije seca y abrí la puerta para irme.

Mientras iba avanzando hasta donde estaba aparcado el coche de Zeus me di cuenta de que me estaba mirando un poco triste.

¿Por qué siempre hago sufrir a la gente a la que quiero? Es un don que tengo desde que nací.

Salió del coche y me abrió la puerta como siempre suele hacerlo. Antes de entrar le di un abrazo y un beso corto.

- Puedo explicarte...

- No es necesario. —me interrumpió.

- No hicimos nada, te lo juro.

- Lo sé. Además creo que ya era hora de que hablaran para aclarar las cosas. ¿Estás bien?

¿Cómo puede estar tan tranquilo? Mateo en su lugar seguramente ya me habría roto el vestido y estaría partiéndome la... No Paloma, deja de pensar en estas cosas.

- Sí, fue todo un malentendido.

Le conté todo lo que había sucedido realmente, o lo que Mateo me había dicho porque pruebas no tengo de que sea cierto.

Aunque algo me dice que sí, que no está mintiendo.

Él me escuchó sin interrumpirme durante todo el camino y después de acabar ya habíamos llegado a su casa.

Subimos las escaleras y al entrar nos fuimos directamente a su cuarto. Nos acostamos en la cama y esta vez Zeus no intentó nada más. Nos quedamos abrazaditos en silencio hasta que decidí romperlo.

- No sé que hacer...

- Lo que tu corazón te diga, esa es siempre la mejor opción.

Pues vamos mal entonces.

- No sé que siento por él.

Sí lo sabes estúpida, otra cosa es que quieras negarlo. —dijo mi subconciente.

Aunque sepa que aún tengo sentimientos por él, eso no quita el hecho de que me haya mentido y se haya acostado con esa vieja sucia.

Sé que lo ha hecho para protegerme, pero debería haber pensado mejor las cosas y no actuar guíado por el miedo.

- ¿Piensas que se merece otra oportunidad? Esa es la pregunta más importante. —preguntó Zeus mientras hundía su cara en mi cuello.

Suspiré al sentir su cálida respiración chocando con mi cuello.

- No, ahora mismo no creo que estoy lista para empezar de nuevo. Mateo solo me trae problemas y ya no quiero eso en mi vida.

Empezó a dejar besos por mi cuello bajando por mi brazo hasta llegar a mi mano. La tomó y le dio unos besos tiernos mirándome a los ojos.

- ¿Puedo hacerte otra pregunta?

- Dale.

- Si ya no quieres nada con él, ¿Me darías una oportunidad para hacerte feliz?

Voten maricas de mil putas, me he esforzado para dejar de ser una escritora inútil e hice este maratón de mierda para ustedes. *se altera* ❤