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El sol de la mañana que se filtraba a través de las persianas venecianas cortaba un camino rayado a través de la cama y resaltaba el rojo en el cabello de Wonwoo, haciendo que el contraste con su pálida piel llamara la atención y las contusiones en la forma de los dedos de Mingyu en su cuello fueran aún más oscuras.

Mingyu no podía apartar la mirada de las marcas mientras Wonwoo dormía pacíficamente acurrucado contra él.

Aunque "acurrucado" era probablemente una palabra demasiado suave. Sus extremidades estaban tan entrelazadas que Mingyu estaba empezando a preguntarse si sería capaz de irse sin despertar a Wonwoo. Fue sorprendente cómo habían logrado terminar así cuando había acostado a Wonwoo en el lado opuesto de su muy grande cama anoche, aunque tampoco es tan sorprendente.

En el pasado, Mingyu había sido acusado en numerosas ocasiones de estar "sofocando" a sus parejas mientras dormían. Seulgi había odiado ese hábito, alegando que era incómodo para ella y que no podía respirar con él medio encima de ella. Fue una de las muchas razones por las que comenzaron a dormir en camas separadas unas semanas después de que su vida de casados comenzara.

Pero Wonwoo definitivamente no parecía incómodo en absoluto. Estaba aferrado a Mingyu mientras dormía, irradiando alegría y paz, como si no hubiera un lugar en el que preferiría estar más que en los brazos de Mingyu.

Tal vez por eso compartir una cama con otro hombre no era tan extraño como podría esperar. También probablemente ayudó que Mingyu realmente no pensara en Wonwoo como otro hombre. Obviamente, tampoco pensaba en él como una mujer. Wonwoo era solo... Wonwoo, una categoría completamente diferente de ser humano, que resultó tener una verga.

Mingyu nunca había creído realmente la idea de que uno podría sentirse atraído por una persona sin preocuparse por su sexo, pero Wonwoo realmente era una persona para él antes de su sexo. Un sol ridículamente entrañable y agradable que lo atrajo y miró a Mingyu como si colgara la luna y las estrellas.

Mingyu hizo una mueca. El rápido enamoramiento de Wonwoo debería haberlo molestado. En cambio, él... mierda, le gustaba. Probablemente estaba jodido por lo mucho que le gustaba. Si fuera un mejor hombre, el evidente enamoramiento y la creciente confianza de Wonwoo le habrían preocupado en lugar de alimentar su fijación por el chico.

Porque Barbara había estado en lo cierto: Mingyu era un bastardo codicioso. Siempre había querido que su pareja fuera suya, en cuerpo, corazón y alma, a pesar de que él nunca había sentido el tipo de compromiso que quería de sus mujeres. Era egoísta, codicioso y anticuado, como le habían informado varias veces sus novias. Había tratado de cambiar por Seulgi, pero después de cómo terminó eso, no lo iba a hacer de nuevo. Era como era, defectuoso y problemático, pero al diablo con eso. Había terminado de pretender ser algo que no era. Era un jodido imbécil y había hecho las paces con eso.

Porque estaba jodido. Había mujeres más que dispuestas a darle lo que quería, mujeres completamente dedicadas a él y su relación, pero no había sido suficiente. Mingyu todavía se sentía insatisfecho, el hambre sin fondo en el fondo de su alma seguía allí, inquieta y codiciosa. Nunca podría ser saciada. Nada era suficiente, cada intento de una relación no pudo satisfacerlo.

Casi hizo que Mingyu se preguntara si esa vieja historia familiar tenía algo de verdad.

La maldición de los Kim, la gente la llamaba en susurros.

Mingyu solía reírse de esa historia, llamándola un cuento de hadas para niños, pero con cada relación fallida y el sentimiento de insatisfacción cada vez más presente en su interior, no podía evitar pensar en eso y cuestionarse.

Su tía había sido quien le contó esa vieja historia.

"Tu tatara-tatara-tatara-tatara-tatara abuelo, Jonathan Kim, fue uno de los jueces durante la caza de brujas de 1692," dijo la tía Mary. "Los juicios de las brujas de Salem," aclaró cuando se percató de su mirada confundida. "Personalmente condenó a más de una docena de brujas a la ejecución."

[LJN] Otras 60 Cosas Sobre MiWhere stories live. Discover now