[LJN] Otras 60 Cosas Sobre Mi

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"¡No, Mingyu, de ninguna manera!"

Wonwoo se estaba riendo, intentando tirar de las sábanas para cubrir su cuerpo desnudo, con un éxito limitado, ya que Mingyu estaba sentado sobre ellas.

"Quédate quieto," lo regañó Mingyu, su lápiz deslizándose sobre su cuaderno de bocetos.

Wonwoo gimió, haciendo una mueca. "Vamos, debo ser un espectáculo," Acababan de tener relaciones sexuales, y él tenía fluidos corporales, mordeduras de amor y contusiones en forma de dedos por todo el cuerpo. "Me veo como una puta," se quejó.

Mingyu lo ignoró, como solía hacer cuando estaba de humor creativo, su mirada se centró por completo en su dibujo.

Wonwoo no pudo evitar sonreírle con cariño. En momentos como este, Mingyu le recordó a su hijo. Guanyi también se enfocaba locamente cuando estaba construyendo algo con su set LEGO.

Su sonrisa se suavizó al pensar en Guanyi. En la semana que se había ido, el niño había progresado muy bien. La psicóloga infantil que Mingyu había elegido para ser la niñera de Guanyi realmente era una buena opción. De alguna manera había logrado hacer que Guanyi fuera más amigable con su padre. Wonwoo se puso un poco celoso, para ser honesto, que ella hubiera tenido éxito donde él había fallado. Le hubiera gustado ser el que cerrara la brecha entre padre e hijo, pero sobre todo se sintió aliviado y feliz, muy feliz de ver a Mingyu tan contento y satisfecho con el mundo.

Esto esta tan mal que ni siquiera es gracioso. ¿Eres feliz porque él es feliz? ¿Justo ahora?

Wonwoo trató de alejar el incómodo pensamiento.

"No frunzas el ceño," dijo Mingyu, su mirada parpadeando entre Wonwoo y su cuaderno de bocetos.

Sonriendo, Wonwoo puso los ojos en blanco. "Sí señor. Como desee."

La mano de Mingyu se detuvo.

Levantó los ojos hacia Wonwoo y lo miró fijamente.

Wonwoo tragó saliva.

Mingyu dejó a un lado su cuaderno de bocetos y rodó sobre él.

Wonwoo rodeó su cuello con los brazos y tiró de Mingyu hacia abajo hasta que sus bocas se unieron y todo lo demás desapareció. Dios, este hombre. Nunca tendría suficiente de él.

.

***

.

Wonwoo siempre había sido una persona madrugadora. Nunca había entendido a las personas que podían descansar en la cama toda la mañana. Pero en las últimas semanas había desarrollado una nueva apreciación por las mañanas perezosas y tardías. Se había dado cuenta de que si alguien tenía a alguien con quien quería pasar todo el tiempo en la cama, todo cambiaba. Los sábados y domingos por la mañana, cuando Mingyu no tenía que ir a trabajar, eran sus días favoritos en absoluto.

Lamentablemente, esta mañana no fue una de ellas.

Wonwoo murmuró en protesta cuando Mingyu trató de liberarse de la maraña de extremidades en la que había estado. "No."

Una risita se escuchó "Tengo una reunión importante esta mañana a la que no puedo llegar tarde."

Con un puchero adormilado, Wonwoo apretó los brazos alrededor de Mingyu y repitió: "No." No te vayas.

Hubo silencio durante un rato, agradable y cálido. Wonwoo nunca pensó que el silencio pudiera sentirse cálido, pero lo hizo, y se deleitó en él. Contrariamente a sus palabras, Mingyu no parecía tener mucha prisa por levantarse de la cama con su mano enredada el cabello de Wonwoo.