ღ I Hope You Choke And Die ღ YugBam [GOT7]

Open Case N° 54: I need cats

—Uhm... —BamBam dio un sorbo a su café y se recostó en su asiento frente a su escritorio, el cual, contra todo pronóstico, se había mantenido en orden por todo el tiempo que había estado de vacaciones. Ni siquiera había un documento fuera de lugar, Yugyeom había mantenido su promesa de no hacer un desastre.

Los dedos del tailandés tamborilearon suavemente sobre la fría madera y reprimió una pequeña sonrisa, se sentía como un pequeño niño otra vez, como cuando te enamoras por primera vez en el colegio y cuentas las horas para volver a ver a esa persona en el salón de clases, buscando cualquier excusa para compartir tus lápices de colores o prestarle alguna hoja de papel... Realmente se sentía así.

Sus vacaciones habían acabado y ese era su primer día de vuelta al trabajo, Yugyeom había encontrado un colegio cercano para Yumi y la pequeña también comenzaría sus clases aquel día, el pelinegro había pedido permiso para llegar tarde ya que debía reunirse con los profesores y aquello le tomaría algo de tiempo, por lo cual aún no había llegado a las oficinas. BamBam estaba nervioso y le estaba costando trabajo ocultarlo, esa era su tercera taza de café de la mañana; no sabía cómo actuaría cuando su novio se apareciera tras las puertas del ascensor, el hecho de que estuvieran ocultando su relación y esto pudiera traerles problemas en el trabajo lo estaba matando lentamente... aún así, él estaba felíz con el rumbo que estaban tomando las cosas.

El sonido del ascensor llegando a aquel piso llamó su atención y él se volvió para toparse con la imagen de un apresurado Yugyeom sacudiendo algunos copos de nieve de su cabello mientras acomodaba su placa policial con la mano con la que sostenía su chaqueta. Las miradas de ambos se cruzaron por algunos segundos y el tailandés sintió su corazón volcándose dentro de su pecho cuando una hermosa sonrisa se formó en los labios del menor, quién comenzó a caminar lentamente hacia él.

—Es bueno tenerte de vuelta, sexy —Yugyeom posó una mano en asiento del tailandés y éste no pudo apartar su mirada de la de él—. Te ves bien —le guiñó un ojo mientras señalaba a su cabello recientemente teñido de castaño oscuro y él sonrió.

—Gracias, amooooo... —BamBam extendió aquella última vocal mientras comenzaba a entrar en pánico y Yugyeom abría sus ojos con sorpresa, él estaba a segundos de llamarlo "amor" frente a toda la oficina. Mark se volvió a verlos y frunció su ceño— ¡AMO ESTAR AQUÍ! —soltó con nerviosismo y Yugyeom suspiró aliviado por aquella salvada.

—¡Esa es la actitud! —Jaebum, que salía de su oficina, señaló al tailandés mientras asentía con aprobación a su buen humor— Todos, por favor acerquense —habló en voz alta y todos los detectives se volvieron a verlo, incluído Jinyoung, quien se paró en el marco de su propia oficina—. Llegó un caso importante hace algunas horas y me gustaría que ustedes cuatro trabajaran en él —señaló al coreano, al chino, al tailandés y al americano—, tú también, Jinyoung —miró a su novio, quien alzó una ceja con sorpresa mientras él guardaba sus manos en los bolsillos de su traje—. Les pasaré la información a todos, pero por favor tengan en cuenta que es un asunto delicado y que probablemente estaremos viendo a las fuerzas especiales otra vez, así que tratemos de no meternos en problemas —miró a Yugyeom y éste suspiró ante la idea de toparse con el capitán Kang otra vez.

—Agh... —BamBam torció sus ojos al pensar en el despreciable sujeto que casi lo dejaba atrapado en aquel burdel— ¿Por qué tanto cuidado con este caso? —preguntó, ya era bastante raro que Jaebum les pidiera a los cinco trabajar juntos, ni hablar de mencionar al capitán Kang y su pandilla de gorilas.

—Estamos de nuevo tras Longjun, es posible que no haya dejado el país aún... —suspiró, Yugyeom alzó una de sus cejas y se cruzó de brazos, acción que no pasó desapercibida ante la mirada del tailandés, quien se volvió a ver a su jefe con algo de duda—, pasen a mi oficina, no puedo hablar mucho de ello sin todos los datos, más les vale que esto no salga de aquí o podríamos meternos en problemas... —el capitán Im se dio la vuelta y todos lo siguieron, incluído Jinyoung, siendo el último en pasar y cerrando la puerta tras de sí, notando a un aburrido Youngjae que parecía muy ocupado organizando cosas en el asiento de Jaebum.