S| ❝WE ARE JUST STRANGERS
FOR YOU, WHY ARE YOU
HELPING US?❞
En donde Alanna se topa con un Alfa que tiene problemas para convertirse, con una cazadora que la persigue su tía muerta y con un chico hiperactivo que está poseído por un e...
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—Sigo pensando que esto es una pésima idea —opinó Blair con sus ojos fijos en el camino y con ambas manos al volante.
—¿Ir a proteger a Scott de los ninjas demoníacos? —preguntó Aiden desde el asiento del copiloto, comiendo de una bolsa con gomitas que había robado de la alacena de nuestra casa.
—Que ella venga con nosotros.
—¿Uh? —dije levantando mi vista de la pantalla de mi celular en donde me encontraba jugando Fruit Ninja junto a Ethan. El chico soltó un pequeño grito de victoria sin dejar de observar el aparato y cuando yo volví mi vista hacia abajo, caí en cuenta de que había perdido y que era su turno. Solté un gruñido de fastidio ante eso y le pasé mi celular, y a los pocos segundos él ya se encontraba deslizando su dedo rápidamente por él para cortar todas las frutas posibles—. ¿Qué hay de malo? Es mejor que quedarme haciendo la tarea —me encogí de hombros—. Por cierto, ¿uno de ustedes ya hizo la de matemática?
Aiden se inclinó ligeramente en su asiento y tomó su mochila azul oscuro que se encontraba en el piso de auto. Rebuscó entre sus cuadernos y libros hasta que dio con uno en específico, y tras haber verificado que era el correcto, me lo extendió.
—Cambia algunas respuestas por si acaso —me avisó el chico.
—Hey —se quejó Ethan de forma infantil cuando le quité mi celular de sus manos, y por ende, lo hice perder en Fruit Ninja.
Asentí con mi cabeza ante lo que había dicho su hermano y le tomé fotos a las hojas para que después, cuando volvamos a nuestra casa, poderlo copiar directamente.
El auto se estacionó finalmente en frente de la casa de Scott después de unos cuantos minutos, y antes de que Blair me pudiese ordenar algo como quedarme en el vehículo, Aiden puso su dedo índice sobre sus labios en señal de que hagamos silencio. Y al igual que su hermano, usó su super oído de hombre lobo para poder escuchar mejor lo que estaba pasando.
No nos hizo falta a Blair y a mí aquello cuando oímos el característico ruido de cosas siendo rotas y un grito femenino.
Eso fue lo que nos bastó para salir rápidamente del auto con las intenciones de ayudar a Scott con los ninjas demoníacos, y mientras que mi primer pensamiento fue entrar por la puerta de su casa como la persona civilizada que era, Ethan y Aiden creyeron conveniente entrar saltando por la ventana, sin importarles ni un poco romper el cristal.
