ME PERTENECES

35-LLEGADA

Yue Yang salió con la misma mirada de pocos amigos de siempre, alzando el mentón viendo por debajo a todos a su alrededor. Con aquella arrogancia que lo caracterizaba, siguió su camino hasta el lugar donde se encontraba el centro de cámaras de vigilancia, y control de las puertas de la Residencia Xiao.

Entro prácticamente silbando y se paró delante de los tres encargados mientras cerraba la puerta con seguro sin titubear.

-Yue Yang. ¿Qué haces aquí?-cuestionó uno

-Vengo a encargarme de un asunto

Sabían perfectamente a que se refería cuando decía eso. Se levantaron de sus asientos, y antes de que pudieran hacer sonar alguna alarma o avisar, el muchacho ya estaba sobre ellos.

Yue Yang golpeó a uno en el rostro, estampándolo con el vidrio de la mesa y dejándolo inconsciente y sangrante. Otro sacó una navaja, la cual esquivo el contrario, y en un movimiento rápido le rompió el brazo dejándolo en el suelo gritando de dolor. El último, parecía ser el más rápido y hábil de los tres. Se demoró en enfrentarlo ya que estaban muy parecidos en nivel, pero terminó por atraparlo desde atrás rompiéndole el cuello.

-Bueno, ya terminé-suspiro Yue Yang-. Ahora...Que empiece el juego

-No lo creo... El señor Xiao tenía razón... eres un traidor-gruño un hombre detrás de él

La voz le pertenecía a uno de los hombres que había golpeado a los muchachos, mientras los llevaban a la habitación para ser asesinados por Xiao He Peng.

El sonido del seguro de la pistola, preparándose para dispararle en la cabeza lo alertó, pero antes de que pudiera hacer algún movimiento, alguien le dio un fuerte golpe desde atrás al hombre dejándolo inconsciente.

Los ojos del mayor vieron con asombro al niño, que tenía una barra de metal y lo miraba asustado con las manos temblorosas.

- ¿Lo mate?-preguntó aturdido

-No, tranquilo...está desmayado-mintió para calmarlo

<<Con un golpe así y la sangre saliendo de sus oídos, debe tener alguna hemorragia. Pero, eso que importa...si lo sabe se traumará más>>

Se agachó frente a él y acariciando su cabeza le cuestionó- ¿Qué haces aquí?

-No me prestaron atención por mis Geges y me escabullí...Estaba buscándolos cuando los vi entrar a ustedes aquí

-Eres un niño muy astuto. Me gusta...-sonrió Yue Yang-. Escúchame atentamente. Debes quedarte aquí escondido, las cosas van a ponerse un poco feas y no quiero que te asustes

-Está bien. No saldré por nada...-asintió Wang Jackson obediente

Yue Yang manejo las cámaras de vigilancia haciéndolas moverse, como una señal que entendieron en cuestión de segundos aquellos que esperaban para atacar. Apretó el botón que mantenía cerradas las puertas grandes, y eso dio inicio a los disparos.

La Residencia Xiao estaba rodeada y los hombres de Wang Yifei ya estaban encargándose de matar a todos a su paso.

Uno tras otro fue cayendo hasta avanzar al segundo piso y continuar con la búsqueda del Diablo.
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Xiao Zhan escupió la sangre contenida, al ver con preocupación a su hermano con ojos nublados por la pérdida de la suya.

-Yao... Encárgate...quiero ver que sufran. Aún no regresa Yue Yang, así que puedes ir divirtiéndote-ordeno Xiao He Peng

El pelirrojo dio una sonrisa ladina y se aproximó a ellos mostrando cierto destello de crueldad en sus ojos.

Una vez frente a ellos, Yao saco una bolsa pequeña de su chaqueta, la estiró en el suelo, y Xiao Zhan pudo ver que eran unas piensas gruesas y unas navajas de diferentes tamaños.