Capítulo 15: Un Error Tras Otro

918 82 44
                                    

Narra Lali.

La habitación de Peter ya estaba reformada, incluido el baño, y la cocina, así que había vuelto a dormir ahí porque sino íbamos al trabajo sin descansar cada día y además de que empezaba a ser muy difícil estar a escondidas de Cande y el abuelo.
Candela se quedaba dos días más y ya volvía a su casa con Andrés. La veía bien pero aún así le había recomendado hacer terapia y también hablar con papá y mamá de lo ocurrido, aunque de esto último, no tenía demasiadas ganas.

—Tenés cara de que dormís poco y coges mucho —me dijo Agustín después de sentarse en la barra y pedirme un café.
—Y vos de que te hace falta un buen polvo —reí.
—Estoy metiendo fichas a Delfina —sonrió —Pero no sé si cae alguna.
—No me dijo nada.
—Entonces no le gusto.
—O no captó tus indirectas. Deberías ir al grano.
—La voy a invitar a comer.
—Me parece bien, podés llevarla a comer a la ciudad, para salir un poco de acá y estar en otro entorno sin todos los chismosos.
—Ya le mandé un mensaje —dejó su celular sobre la barra y dio un sorbo al café —¿Con quien estás teniendo sexo? —levantó una ceja —Porque Nico está a dos velas.
—No lo conocés.
—Dale, no somos muchos acá ¿Quién es? Pablo quedó embobado con tu amiga así que no, Tincho tiene novia, así que tampoco... —dio otro sorbo —Peter está a full con mi secretaria —soltó una carcajada —este pibe se olvida que hay cámaras por toda la empresa ¡Se libra porque lo conozco de toda la vida sino lo sancionaba!
—Creía que se había terminando eso —intenté disimular mi cara de fastidio.
—No sé, el de seguridad me cuenta cada vez que los pesca en las cámaras y yo se lo mando borrar. No sé cuando fue la última vez la verdad pero no creo que lo hayan dejado si lo pasan bomba —se terminó su café, me pagó y me dejó propina —Me voy a trabajar y ya me contarás quien es ese pibe. Tiene que tener mi aprobación.
—Chau Agus —sonreí pero lo quería matar.

Me pasé la mañana mordiendo mis uñas, estaba muerta de celos y rabia de solo pensar que seguía cogiendo con esa mina, porque aunque no habíamos vuelto a sacar el tema, me había dicho que no quería estar más con ella y con eso me había quedado.
Cuando acabé mi turno, me fui a casa de Peter. Él salía del trabajo dos horas después que yo pero quería acabar de pintar un mueble por él.

—¡Que linda sorpresa! —sonrió y me dio un beso y un abrazo —Te quedó perfecto ¿Qué tal la mañana?
—Bien, sin muchas novedades —sonreí —Traje unas empanadas de pollo por si tenias algo de hambre.
—Si, mucha y eso que hago un parón para comer pero este trabajo me mata más que ser albañil y vivo con hambre —fuimos a la cocina —¿Todo bien? —levantó una ceja y se me quedó mirando después de dar un mordisco a la empanada —Estás como rara.
—Todo bien, estoy cansada, nada más —mentí no quería quedar de celosa.

Comimos, hablamos del trabajo y de las cosas que queríamos empezar a hacer para ser más felices, como nos habíamos prometido, así que por un momento me olvidé de lo que me había dicho Agustín hasta que Peter la nombró.

—Manuela me apuntó a un curso para aprender a manejar la grúa.
—Ah, que bien —sentí como me estaba invadiendo la rabia.
—Si, quiero hacer todo lo que enseñen en la empresa porque además si estoy con la grúa cobro más ¿Qué hacemos a la noche? Pablo va a venir ayudarme a las cinco pero a las ocho quedo libre. Igual si querés te podés quedar, vamos a arreglar el baño de abajo.
—Me quedaré con mi hermana e iremos a casa de Delfi así que no sé, seguro que ya cenamos juntas y después iré directa a casa a descansar.
—¿No te vas a quedar a dormir conmigo?
—No, necesito recuperar horas de sueño —reí —pero el finde podemos hacer algo porque lo tengo libre.
—Podemos ir a andar en bici hasta el valle y hacemos un picnic.
—Eso estaría bien —me acerqué para darle un beso —Me voy a casa.
—¿No te quedás un ratito más? —me agarró de la cintura.
—No puedo Peter, igual... Seguro que hoy tuviste suficiente fiesta —solté en tono de broma, pero muy en serio.
—¿Por? —me miró confundido.
—Nada, nada —me solté —Era un chiste malo.
—Te pasa algo. Lo sabia.
—¡Qué no me pasa nada!
—Bueno, cuando quieras me lo decís —se encogió de hombros —Pero no tires indirectas, que no entiendo, sino querés hablar de lo que te pasa.
—Ok —agarré mi bolso y me fui hacia la puerta.
—¿Te vas a ir así?

Me acerqué, le di un beso corto y me fui sin decir nada.
Pasé a buscar a Cande y nos fuimos a pasar la tarde con Delfina en su pileta, tomando mate, comiendo facturas y charlando pero yo estaba muy en la mía y además, no poder compartir con ellas lo que estaba pasando con Peter, me empezaba a desesperar.

—¿Y como es que no te quedaste con Agustín? —le pregunté a Delfi —¿Fuiste a comer y huiste?
—Tuvo que ir al trabajo pero quedamos otra vez mañana.
—¿Y qué onda? —preguntó Cande.
—Me sorprendió la verdad ¿No te molesta, no? —de repente me miró y abrió los ojos como platos —¡Me agarró por sorpresa y ni te pregunté, boluda! —me agarró por los hombros y me empecé a reír —¡Perdón!
—No seas imbécil, Delfina ¿Como me va a importar? ¡Fuimos novios cuando éramos unos enanos!

Me importaba cero que entre ellos pudiera haber algo y me parecía que hacían una linda pareja, además, que eran dos grandes personas que aunque no pegarán mucho, en un primer momento, tenían muchísimas cosas en común.
Cuando llegamos a casa, Cande se fue directa a la cama y yo me metí en la ducha. Al salir y entrar en la habitación, Peter estaba durmiendo en mi cama. No puede evitar morir de ternura, al verlo abrazado a mi el peluche que me había regalo, y que conservaba, como oro, después de estos años.
Me puse una camiseta de pijama y me metí despacito en la cama.

—Quería dormir abrazado a vos... No te preocupes que me levanto antes y me voy por la ventana... —me dijo sin abrir los ojos e hizo morritos para que le dé un beso.
—Buenas noches Peter... —me aferré a él.
—Buenas noches, chiquita —susurró.

--

Peter se fue antes de que me despierte pero me dejó una notita.

"Que lindo es dormir con vos"

Me sentía bastante idiota por los celos que había sentido, sin motivos, y estaba dispuesta a olvidarme de Manuela y los videos sexuales con Peter. Me iba a quedar con lo que él me dijo cuando me besó y era que ya no quería hacer nada con ella. Tenía que confiar en él.
Después del trabajo fui para casa de Peter para darle una sorpresa, su coche ya estaba en la entrada así que me metí por la puerta de atrás para darle un susto. Había un tapado de mujer tirado en el suelo, miré por la ventana hacia la sala y supuse que aquella morocha que estaba desnuda encima de Peter, y besándolo, sería Manuela. No quería mirar como seguía aquella situación y me fui aguantando mis ganas de llorar.

—¿Nos vemos en una hora? —le pregunté a Nico cuando me atendió el teléfono.

♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡

#MLF tendrá 20 capítulos y un epílogo 💚
Gracias por leerme, compartir y votar.
Recuerden ir a dar RT al tuit del capítulo, comentar y compartir.
Mi Lugar Favorito En El Mundo no está entrando en la lista de historias Laliter 😢 Ayúdenme a que lo haga, votando, comentando y compartiendo, porfi! 💚

Mi Lugar Favorito En El Mundo ||Laliter||Donde viven las historias. Descúbrelo ahora