Ecomoda parte 2:)

¿Cómo Hago?

Solo para que sepan, que es capítulo doble por lo tanto No subiré otro capítulo más tarde, si no hasta mañana.
Los Tqm. ❤️

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Sandra apenas si estuvo en el hospital tres días, tanto ella como la niña estaban muy bien. Durante ese tiempo, Mario Calderón, pasaba mucho tiempo con ellas, y los centros de rosas blancas y rosadas, llegaban a diario, con cariñosas tarjetas del papá.

El día que les iban a dar el alta, cuando Mario llegó, vio que Sandra estaba acompañada por Armando, que vigilaba a la pequeña Camila, que correteaba por la habitación, abrazada a Milagritos, su muñeca favorita.

Calderón.- Buenos días Sandra, ¿qué hubo hermano?...

Sandra.- Buenos días doctor, ya nos dieron el alta, en cuanto me traigan a María, nos podremos ir a casa, estoy deseando.

Armando.- Camila, no te sientes en el suelo que está frío, mi amor...qué papá, ¿cómo se encuentra?, ¿ya está más tranquilo?

Calderón.- Sí, creo que sí, aunque esta señora tan terca, apenas si me deja, tomar una decisión.

Sandra.- Ya se lo dije don Mario, Vd no tiene responsabilidades y derechos, nada más que con María, y yo no se las voy a negar, pero mi vida va a seguir como hasta ahora, no va a haber mayores cambios.

Calderón.- Bueno, bueno ya hablaremos y ¿a dónde llevaron a mi niña?...

Armando.- La llevaron a ponerle sus primeros aretes, Betty la acompañó, se los compramos ayer, para algo somos los padrinos ¿o no?...

Calderón.- ¿Cómo así, que los primeros aretes?... ¿Le están agujereando las orejitas a mi niña?...

Sandra.- ¡Pues claro doctor!, o es ¿que quería que la niña fuese �mocha� (*).... y me la confundiesen con un muchacho?... ¡Ni más faltaba!, su madrina le trajo unas perlitas muy pequeñas montaditas en oro, que son divinas, va a estar preciosa.

Calderón.- ¡Pero eso le va a doler!...

Sandra.- Pues la verdad es que yo no recuerdo si duele, siempre he tenido los pendientes, a ver Camilita (tomándola en brazos).... ¿duele?...

La nena que no sabe de que hablan los adultos, pero si sabe que a ella no le duele nada, responde categórica.

Camila.- No �mele�, no �mele nada�.... Camila �tá mena�...

Armando se parte de la risa, y tomándola en brazos, se la come a besos.

Armando.- Ya ve hermano, ella es la que tiene memoria más reciente y bien claro que ha dicho que �no mele nada�... así que tranquilo.

En ese momento entra Betty cargando a la pequeña María, que viene toda vestida de rosa, con un pelele enterizo de lana y envuelta en una toquilla, también del mismo color. En sus orejitas luce sus flamantes perlitas, y en la cabecita un diminuto adorno de color rosa.

Betty.- Bien, pues ya nos podemos ir a casita... Ha sido muy valiente, solo se quejó un poquito, pero ni una lagrimita, y ya viene bien linda, como toda una señorita... ¡Hola Mario, no le había visto!, mire que preciosa viene su hija.

Calderón enseguida la cargó en sus brazos y dándole un besito en la frente, dijo con esa cara de bobo, que se estaba haciendo habitual en él.

Calderón.- Ella siempre está bella.... (guiñando un ojo), se parece a su papá... ¿cómo habría de estar si no?...