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C A P I T U L O 26

C a p i t u l o 26 "Hospital"

— Lamento mucho no poder ir esta noche, Zayn, por favor diles a todos que me disculpen — digo cuando subo a mi automóvil y conduzco hacia mi departamento

— Sabes que si quieres, podemos ir a tu departamento a visitarte — dice el moreno al otro lado de la línea

— No es necesario, de verdad. Siendo sincera, solo quiero llegar y tirarme en mi cama, mañana volveré a tener un día pesado así que quiero descansar unas horas, pero prometo que el próximo viernes sin falta voy al bar

— ¿Lo prometes?

— Lo prometo — digo y escucho como mi amigo suspira

— Isabella, por favor si necesitas algo llámame, no importa la hora que sea, dime si necesitas algo

— Eso haré, gracias Zayn — respondo sincera y después de despedirnos, colgamos la llamada

Aprovecho un semáforo en rojo para enviarle un mensaje a Sam y le escribo que ya he salido del trabajo, que casi voy llegando a mi departamento.

"¿Cómo te sientes? Avísame cuando ya estés ahí, por favor, linda. Sam x"

"El susto ya pasó, te juro que estoy bien, gracias por preocuparte. Te mando un mensaje cuando llegue. Isabella x"

Después del repentino desmayo de la semana pasada, todos han estado encima de mí preguntando cómo estoy. Sam y mis padres se encargaron de informarle a Harry sobre lo sucedido esa noche y él se tomó el tiempo de avisarle a todos.

Mensajes y llamadas por parte de mis amigos y familia no han faltado; sé que están preocupados por mí. Pero no quiero eso, así que durante el último tiempo me he dedicado a ignorar todo esto.

Sigo teniendo demasiado trabajo, así que un simple desmayo no me va a interrumpir los deberes.

¿Me he sentido mejor? No, al contrario.

La fatiga aumenta día tras día y el aturdimiento se presenta constantemente. No he querido ni mirarme al espejo, pues no quiero imaginar como me veo, los comentarios de todos diciendo que me veo muy mal ya son suficientes.

No sé en qué momento llego a mi edificio. Así como el último mes, la mayoría de mis movimientos están en automático.

Para mi sorpresa y mala suerte, la camioneta de Harry se encuentra estacionada aquí, así que mis planes de irme a la cama no serán posibles, menos, al darme cuenta que no está solo. Paige viene con él.

En cuanto me ven, los dos bajan de prisa y caminan en mi dirección.

— Creí que estarían con los demás

— ¡Isabella! Te ves horrible — es lo primero que dice Paige cuando está frente a mí

— Gracias, tú como siempre luces hermosa y fresca — le sonrío con sarcasmo e inmediatamente parece avergonzada por sus palabras

— Paige, por favor — Harry le dirige una mirada de enojo a su prometida — Isa ¿qué está pasando? — me pregunta — Zayn nos dijo que nuevamente no irías al bar

— Estoy cansada, sólo eso

— ¿Sólo eso? Llevas diciendo las mismas palabras por no sé cuánto tiempo — se queja

— Pues es eso — me encojo de hombros — Pensé que los vería hasta mañana para hacer la prueba del menú

— No me cambies de tema — mi mejor amigo pone sus grandes manos sobre mis hombros — ¿Has ido al médico?