La rosa y el caballero.

III

Mi nombre es Kakashi Hatake soy el sexto hokage de la aldea de Konoha y como Anko decía como buen hombre que soy y teniendo necesidades, digamos que me he dado mis mañas para tener mis propias diversiones, obviamente ocultas, ya que tenía una imagen que cuidar..

No es que yo hubiera pedido este puesto, pero creo que mis esfuerzos por la aldea habían dado frutos y ya que Homura Mitokado y Koharu Utatane me habían sugerido buscar una esposa que le diera más estabilidad a mi actual digamos no reinado, pero si mandato..

No me había quedado más que acceder y cuándo me habían dicho quién sería mi futura señora Hatake, ni yo me lo había creído, pero digamos era algo digno de lo que merecía..

Hinata Hyuga la primogénita del hombre más orgulloso que había conocido en mi vida. A decir verdad eso me había sorprendido, ya que era raro que alguien del linaje de ella accediera a que la unieran con alguien más que no sea de su misma sangre, ya que era bien sabido por los aldeanos que entre ellos tenían algunas extrañas tradiciones que muchos conocían como incesto..

Pero eso era algo que por lo pronto no me iba a preocupar, hacía mucho tiempo que no la había visto y sin duda ahora a su regreso era muy diferente de aquella chiquilla asustadiza que conocí, ella era como un ratoncito de laboratorio, pero sin duda alguna había cambiado, yo no era alguien que hablará mucho, más bien me gustaba coger y mucho y creo que Hinata Hyuga sería un exquisito juguete y quién sabe tal vez hasta terminé enamorándome ella.

[...]

—Tachi bienvenido me alegra que ya llegarás, pensé que no ibas a venir, hasta pensé que ignorarías mi invitación por quedarte como niño bueno en casa..

—Pues ya vez que no es así Shisui..

—Bueno, pues ahora anímate y empecemos tu festejo..

—Shisui mañana hay que trabajar y..

—Nada a festejar, no me digas que vas a ser igual de amargado que..

Él me señalaba hacia una mesa discretamente, cuándo me brindaba una copa y justo ahí veía unos ojos casi iguales a los de ella, pero estos eran fríos, analíticos y orgullosos, pero era tan raro ver a Neji Hyuga por estos lares y al observar a mi primo —vamos Shisui no los molestes y no te metas en problemas innecesarios quieres..

—Pero cuáles problemas primo, si no estoy haciendo nada..

Y al verlo tomar un trago de su bebida —lo estás provocando, déjalo en paz quieres, ya suficiente tenemos con tratarnos cómo enemigos, cómo para crear un motivo más de rivalidad entre nosotros..

—Esta bien Tachi, puedes decir lo que quieras, pero admite que es un presumido, hup..

Solo podía mover la cabeza en forma negativa, ya que intuía que ellos pensaban exactamente lo mismo de nosotros.

[...]

Despertaba, viendo como el sol iluminaba la habitación, al estirarme y apagar la alarma antes de que sonará, aún podía escuchar lo voz de mi padre reprendiéndome..

Creó que con él siempre será lo mismo, siempre me repetía las mismas palabras, cómo si lo fuera olvidar, ya hasta parecía una canción..

Por suerte después del regaño y de cenar, no me había molestado más, Hana y yo veíamos una película de terror, obviamente escogida por ella y justo cuándo él malo de la película iba a aparecer, Neji nos asustaba, ya que llegaba justo en ese preciso momento al entrar tambaleándose, intentando encender la luz..

Sinceramente eso sí que era raro o al menos yo nunca lo había visto así, aunque supongo que de vez en cuándo era bueno se relajará, además era tan tierno verlo muy cariñoso con Hana y conmigo al escucharlo decir cuánto nos quería, ya que por lo general él era frío.