Capítulo 16

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El lunes me sentía nerviosa, decidí no llevar mi moto y en lugar de eso subí al auto de Karin, Charlie a veces prefería irse en el autobús con sus amigos así que solo éramos las dos, escuchamos música todo el camino y al llegar al colegio repetimos lo de siempre.

En el pasillo de los casilleros vimos que Alexander ya estaba ahí, mis nervios se intensificaron y mis manos comenzaron a sudar, abrí mi casillero un paso a la vez ya que no lograba controlar mi pulso, quizás se debía a que el acercamiento o más bien farol del viernes era lo más cercano a mi vida romántica, que era inexistente.

Toda la vida siempre había estado con mi padre y luego mis hermanos sobreprotectores, había quienes afirmaban que Derek y yo terminaríamos juntos pero eso era imposible por ambas partes, ya lo habíamos hablado al cumplir los trece años y nos dimos cuenta que nuestro amor es fraternal no romántico.

Por otro lado siempre me concentré en las carreras y luego a pasar mi duelo, así que era comprensible que me sintiera así, ¿Verdad?, la primer y tercer clase de hoy las teníamos los tres juntos, después de esas estábamos Alexander y yo solos, «por Dios no pienses en nosotros juntos» me regañé internamente.

Caminamos al salón de clases dejando a Alexander en medio de las dos, al llegar cada uno fue a su asiento, segundos después el profesor entró comenzando su clase. Una hora más tarde nos despedimos de Karin para ir a nuestra segunda clase.

Antes de llegar al salón alguien pasó a un lado de Alexander golpeando su hombro, eso lo hizo detenerse y yo lo imité, miré en la dirección en la que se había ido el culpable quien tenía el cabello castaño casi rubio, lacio y despeinado, había sido Travis, noté como las facciones del rostro de Alexander se endurecieron, respiró lento y profundo antes de continuar caminando.

—¿Sabes quién es?— preguntó.

Su pregunta me pareció rara, Karin sabía quién era.

—Es un alumno nuevo— dije estudiando el rostro inmutable de Alexander.

—Ya veo.

Continuó caminando para ingresar al salón y lo seguí.

Tomamos asiento uno a un lado del otro y pasamos el resto de clases como la vez anterior.

Antes de llegar a la fila en cafetería alguien le cortó el paso a Alexander, Travis de nuevo, se había metido de golpe al pasillo de cafetería abrazando a dos chicas para dirigirse a la fila, lo vi respirar de nuevo a la vez que apretaba su puño, luego lo aflojó y extendió su mano invitándome a pasar delante de él en la fila, por supuesto acepté su invitación.

¿Quién en sus cinco sentidos la rechazaría?, No lo sé, pero esa persona no sería yo, ¡no señor!, no a un Alexander molesto. En la mesa nos esperaba Karin comiendo de lo más tranquila.

—Te dije que no necesitábamos estudiar— me acusó como si hubiese sido idea mía.

—Tal vez no...

—Las pruebas eran de más normal— me cortó.

Estaba realmente indignada y decepcionada.

—Si, también creí que me costarían más pero...

—¡Te lo dije!— mencionó exasperada como si fuera lo más obvio del planeta.

—Te recuerdo que fue tu idea— alcé una ceja manteniéndole la mirada.

Karin abrió la boca y luego la cerró de nuevo

—Gracias— le dice gozando su silencio.

—No he dicho nada— refutó

Desde ceroWhere stories live. Discover now