Mafer...

2.9K 313 111
                                    

POV Calle

Mi boda con Sofía estaba a solo dos días de realizarse y sinceramente no tenía ganas de llevarla a cabo.

Iba a ser una boda muy pequeña y solo enfocada a nuestros amigos y familiares más cercanos que no sumaban más de veinte personas y eso era lo único que había logrado con mi ahora prometida.

Que respetara mi decisión de hacerlo pequeño por respeto a mi madre, quien tampoco iba a ser posible que estuviese en presencia física en ese día conmigo.

Y todo gracias a que estaba empeorando cada vez más, era como si cada procedimiento nuevo o más fuerte no le hiciera ningún efecto, era como si mamá se rehusara y rechazara todo lo que le hicieran.

Porque actualmente estaba enfrentando una etapa de tipo parálisis total o una especie de coma donde todo su cuerpo estaba estático, sin moverse un solo centímetro y lo único que podía mover eran los ojos en algunas ocasiones.

Todo esto estaba siendo de lo más doloroso para nosotros, pero sobre todo estaba siendo terriblemente torturante para ella misma.

─Amor, tienes que ir por tu vestido ya mismo.─me avisó Sofía colgando la llamada con la tienda de vestidos de novia donde habíamos comprado nuestros vestidos. Entrelazó nuestras manos y yo me solté de inmediato poniéndome de pie y acercándome a la otra silla más cercana al cuerpo de mi madre. Estábamos en el hospital como todos los días.

─Puedo ir mañana.─respondí sin mirarla, solo enfocándome en mamá.─Nos casamos en dos días, así que no hay prisas.─rodeé los ojos y tomé la mano estirada con el suero de mi madre. Mafer parecía seguir a Sofía con la mirada, se le veía de cierta forma incomoda o incluso me atrevería a decir molesta.

─Daniela, ¿Te das cuenta que yo preparé toda la boda?─me tomó del hombro y me obligó a mirarla.─Tu no has movido ni un culo y todo gracias a tu madre.─la señaló sonando sumamente grosera. Como si su "suegra" fuera una carga para ella.

Sofía había cambiado mucho con mis padres, antes los quería como si fueran sus segundos padres y desde que empeoró mi madre cambió casi por completo.

─Si y no me interesa lo que opines, yo tengo que estar con ella siempre y no estar ahí perdiendo mi tiempo preparando algo que yo no planeé para estos momentos.─respondí duramente volviendo a girarme hacia mamá quien seguía con los ojos puestos en mi prometida. Yo sabía que Mafer escuchaba y entendía gran parte de las cosas que le decíamos y sabía que le había dolido que ella dijera eso.

Sofía no aguantó la realidad de las cosas, se limitó a salir del cuarto de hospital cerrando con furia la puerta haciéndome sobresaltar un poco. Mamá esta vez miraba mis ojos con cierto mensaje en su mirada como siempre que Sofía estaba presente, era una mirada indudable que siempre me regalaba cuando se trataba de mi prometida.

─¿Por qué siempre me miras así mamá? ¿No te agrada Sofía?─le pregunté a mi madre como si pudiese responderme.─Pero antes te caía muy bien, solían hacer cosas juntas, se divertían, entre otras cosas. Tú la querías muchísimo...─solo me miraba con ese brillo lleno de impotencia.─Pfff, si tan solo pudieras hablar y decirme lo que piensas de ella y de mi, si tan solo yo entendiera tu desprecio hacia ella...─negué con la cabeza. Acaricié su brazo y empecé a pensar.

A pensar en Poché específicamente.

─¿Y qué dices de Poché? ¿La recuerdas?─seguí con mis preguntas.─¿Ella si te agrada?─mamá cambió su mirada, era increíble cómo iba aprendiendo a identificar la comunicación de Mafer con solo una mirada.─Vaya, creo que si recuerdas a esa chica, bien, pues te contaré un secreto y espero puedas guardarlo.─me acerqué a ella.─Bueno, antes creía que Sofía era el amor de mi vida pero la realidad de las cosas es que estoy muy enamorada de Poché, pero no podemos estar juntas por muchas cosas, entre ellas que ella es novia de otra chica maravillosa.─susurré aquello ultimo con la voz entrecortada.

POR SIEMPRE TUYA (CACHÉ)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora