8. Oscuridad

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Mi celular empezó a sonar.

Decido contestar la llamada.

<<—¿Y bien?>>

—No sé de qué hablas— me hago a la tonta —Si pudieras ser más específico te entendería

<<—Maldita sea Lizbeth, ¡ya sabes de lo que hablo!—>>

—Me hablaron, tengo una misión.

<<—¿Dónde?— me dice seriamente>>

—No formas parte de ella— digo gélidamente y cuelgo.

Me quedo viendo un rato la pantalla de mi celular para asegurarme de que no me vuelva hablar, al cabo de dos minutos me lo guardo en mi bolsa de mi falda escolar.

Necesito cambiarme de ropa, regreso al coche enciendo el motor del carro, y me acuerdo que robe una tarjeta de crédito, lo que se me hacía raro que funcionará ya que de las pocas que quedan vivas siempre se las bloqueaban.

...

Después de manejar algunos minutos llegué a la plaza comercial que más cerca me quedaba. Estacioné el coche y entré.

Fui a la tienda de ropa a la que suelo ir. Cuando entro rápidamente huelo a vainilla combinada con alguna esencia.

Han contratado a alguien nuevo. Un chico, tal vez uno o dos años mayor que yo; lleva una playera con el logo de nirvana, unos pantalones de mezclilla anchos y un poco rotos, tenía una chamarra de color negro y unos zapatos converse negros y blancos.

Cuando entré sonó la típica campanilla que te avisa que un cliente ha entrado y el chico me miro; tenía un ojo de color verde y el otro color marrón con un poco de verde, tenía pecas alrededor de sus mejillas, su pelo de color marrón oscuro desarreglado le caía en la frente mientras leía un libro.

Solamente me miró y alzó una ceja y siguió con su lectura ignorándome por completo.

Empecé a escoger que ropa iba a comprar.

...

—Son $780— la voz estaba ronca y severa del chico me trajo a la realidad.

Saqué la tarjeta que tenía de mi bolsillo de mi falda y se la entregué a aquel chico.

Me regresó la tarjeta y eso fue todo.

<<necesito cambiarme de ropa>> pensé y me dirigí otra vez a los vestidores.

Me puse una camiseta con el logo de ghostmane que tenía grabado Trash Gang en la parte de arriba y como logo un fantasma "bailando"; me quedaba un poca ancha la camiseta pero no importa porque me puse unos pantalones negros ajustados con un cinturón marrón como el color de los ojos de aquel chico y unos zapatos como los de él, sólo que los míos eran de botilla.

Cuando salí el chico se me quedó mirando por unos instantes, pero retiró la mirada cuando se dio cuenta que lo había pillado.

Mis comisuras de la boca se alzaron.

Salí de la tienda.

Mi teléfono volvió a vibrar.

Saqué el teléfono del bolsillo trasero de mi pantalón.

Contesté.

—¿Qué quieres?

<<—Они нашли тебя [te encontraron]>>

—дерьмо [mierda] —

Empecé a mirar a mi alrededor, no vi nada.

—Вы уверены, что говорите? [¿estás seguro de lo que dices]

<<—да [sí]>>

Y colgó.

Sentí que me miraban, volteé a mi derecha...nada, a mi izquierda...nada, atrás...tampoco, frente mío y vi que un hombre de traje me estaba mirando al otro lado de la plaza, estaba hablando con alguien por teléfono mientras me veía; la multitud de gentío pasó y él desapareció.

Alguien susurró detrás mío.

—Пойдем со мной Лизбет [ven conmigo Lizbeth]— su voz era la misma que había oído unos instantes. Me jalaban directo a la tienda que hace unos momentos había salido cuando volteé vi que era aquel chico con heterocromía que me atendió.

—¿Cómo sabes mi nombre?— lo miré fijamente

El sólo alzó sus hombros para restarle importancia —Eso no importa, debes salir por allí— y me señaló a una pared, no había nada ahí

—Es una pared, idiota

Rodó los ojos y me empujó hasta allí.

Gruñí, y enfoqué mi vista a aquella pared, vi el mismo símbolo de la huella dactilar, puse mi dedo y lo escaneó dejándome pasar.

Miré al chico y le asentí con mi cabeza dándole las <gracias>.

Era un oscuro pasillo y parecía largo, no se veía nada dentro de él.

—Entra de una vez— me gritó el chico y ví como se acercaban unos hombres al local.

Giré la perilla y entré; clic, la puerta se ha cerrado y estoy en un pasillo totalmente oscuro. Después de unos segundos escuche a los tipos en el local y le gritaban al chico donde me encontraba y él calmadamente les decía que no tenía idea de lo que hablaban.

Se escuchaban golpes, cosas romperse y deduje que el chico estaba peleando con los hombres.

Disparo.

Se escucharon unos cuatro disparos más en el local.

Podía escuchar a lo lejos a la gente gritar como respuesta al ruido de los disparos.

Después de unos minutos la puerta estaba siendo intentada abrirse.

Ping.

La puerta se abrió y entró el chico. Estaba muy golpeado pero no lo puedo detallar por la carencia de la luz que hay.

—Te había dicho que te largaras— me gruñó dando bocanadas de aire

—N-no sabía que ibas a entrar, cuando escuche los disparos me quede—

—Asesina profesional y se asusta con unos simples disparos

—No me asusté de los disparos, dije que cuando los escuche me quedé; aun no entiendo quién eres y cómo sabes mi nombre— y seguí —Mira, no te necesito para que me ayudes, me las sé arreglar yo sola, ¿entendido?

—¿Acaso alguien te ha dicho que eres irritante?—

—Gracias— le dije con una sonrisa forzada

Bufó —sígueme

Me agarró de lamuñeca y me dirigía por el pasillo

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