13. #029

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—No busco problemas— alcé mis manos como muestra de paz

El viejo solo se limitó a verme al igual que los demás.

—Głupia dziewczyna [niña estúpida]— Habló la cajera, buen momento para haberme quedado en mis clases de checo, si eso era checo casi siempre me confundía con los idiomas; la mujer tenía un cuerpo tosco al igual que su cara, pero la forma de pararse decía todo de su creación; soldados berserker, los más letales.

—Gracias, que linda— le dirigí una cálida sonrisa —Pero lamentablemente no hablo checo, les diré lo que quiero y me iré—

—polaco—volvió hablar la cajera

—¿Disculpa?— me volví hacia ella

—Te confundiste de idioma al igual que te confundiste al venir a esta tienda— su acento se denotaba bastante.

—No sé quién seas, pero al parecer no estás actualizada del todo, ¿no?, tu gente y yo— dije señalándonos —tenemos tratos que por generaciones hemos respetado— Mentira, nunca había hecho tratos con los polacos.

—Tal vez no seas tan importante— dijo restándole importancia —Será mejor que te regreses de dónde viniste— El brillo del filo de una navaja es reconocible a simple vista, un movimiento en falso y ella la lanza en mi dirección.

—Espera— sé que con ellos existen algunos códigos estrictos que muy pocos soldados de rangos mayores conocían su significado, a mí me habían asignado uno cuando "trabajaba" con rusos, tal vez ellos también tengan —Кровавый рубин 29

Un hombre fornido que no había visto se había parado junto con 4 sujetos más y se me acercaron

—Dime, cómo una niñita linda como tú se atrevió a venir hasta aquí— dijo uno de ellos y me acarició la mejilla.

—Ahora eres de ellos— Espetó la cajera y siguió contando monedas

Le di un buen puñetazo al tipo que tenía enfrente —Vuelves a tocarme idiota —hice aparecer una cuchilla en mi mano— y te torturo hasta que desees estar muerto—puse la cuchilla bajo de su cuello —pero no te dejaré hasta que yo quiera, ¿entendido? — amenacé seriamente.

Una risa ronca se escuchó entre los 4 hombres parados frente a mí.

—Vaya, vaya, no te reconocí con ese disfraz, me da gusto volver a verte beth— el tipo dio un paso adelante y pude ver su cara.

Baje la cuchilla bruscamente.

Solo me limite a asentir ligeramente con la cabeza.

—Frog— dije secamente

Frog, un sujeto agradable cuando cumples con los encargos, hace años que no lo veía, pero no ha cambiado nada, sigue siendo el viejo con barba recortada hasta el mentón con su pelo castaño bien peinado, ha subido un poco de peso, pero sigue en buena forma; ha de tener unos 55 años hasta este punto. Llevaba un traje formal de color azul que hacía resaltar sus ojos y con una postura intimidante.

—Me sorprende encontrarte aquí con todo este... — y señale alrededor —gentío, no pensaba que te esconderías aquí

—Lo mismo digo. Como recordarás— de su bolsillo sacó una afilada navaja y la empezó a juguetear entre sus dedos finos y largos —tenemos algunos problemitas con los sujetos que trabajas— me miró —y si mal no recuerdo nos habías prometido algo que no hemos recibido aún— siguió admirando la cuchilla que tenía en sus dedos

Sonríe ampliamente.

—Oh sí, pero...— me interrumpió

—¿Pero?, ¿enserio me vas a decir pero's? — me dirigió una mirada fría.

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