Los jóvenes Hargreeves

Cap. 23 "Soy un adorno"

—En la oficina con Vanya, Rose y Luther—

Reginald: Alguno de los tres me quiere explicar que significa esto?! —mostrando un periódico con lo sucedido—

Rose: Vaya que las imprentas trabajan rápido. —murmuro—

Reginald: Y bien?

—Nadie contesta—

Rose: Los niños salieron mientras estábamos entrenando, Siete fue a buscarlos pero ya que no conoce muy bien la ciudad se perdieron, tratando de llegar a la academia terminaron en el centro comercial, Cinco y yo fuimos a buscarlos y los encontramos a tiempo

—Rose hablo sin titubear ni un gramo de duda en su voz se notaba, mentir se le daba tan natural. Luther y Vanya la miraron confundidos—

Reginald: Muy bien, con respecto a lo que hizo frente a los noticieros, buen trabajo, pueden retirarse!

—Los tres salen de la oficina—

Vanya: Porque dijiste eso? —le pregunta a Rose—

Luther: No creí que fueras capaz de mentirle asi a papa.

Rose: Sabia que si hablabas tu, ibas a meter en mas problemas a Siete, y eres muy bueno para decir a verdad, ahora si me disculpan iré a dormir.

Vanya: Pero son las 3pm?

Rose: Si me despiertan a la hora de la cena seria fantástico! —dijo desde lo lejos—

Luther: Por un momento creí que había un poco de corazón en ella, pero esperé demasiado. —se va—

Vanya no sabia que decir, cualquiera de sus hermanos la hubiera delatado fácilmente, debía hacer algo, asi que fue a la habitación de Rose.

Vanya: "R"?...puedo pasar?

Rose: Si, pasa!

Vanya: —entra completamente al curto y cierra la puerta— oye tu de verdad lo hiciste por, por mi?

Rose: —la mira— bueno, por ambos en realidad.

Vanya: Pero dijiste—

Rose: Se lo que dije, solo era para que a Uno no se le subiera a la cabeza.

Vanya: Yo debí ser la que estuviera castigada. —cabizbaja—

Rose: No fue tu culpa, solo querías ayudar y Uno bueno, sabia que no le iba a mentir a Reginald, su moral es muy fuerte. Y tampoco seria capaz de soportar que lo regañaran o castigaran. Lo dejo muy claro.

Vanya: Como lo sabes?

Rose: Pues, en la ORDA tenia mucho miedo a equivocarme o fallar en una misión, claro que los castigos eran inhumanos pero, creo que puedo entender el hecho de no querer fallarle a un superior o en el caso de el, a su padre.

Vanya: Gracias. —sonríe—

Rose: No hay de que.

—Ambas se quedan mirándose con una sonrisa por unos segundos—

Rose: Si bueno ya basta de cursilerías, si me permites no he podido tener un sueño decente en dos días, asi que —abre la puerta— Uno saca esta cama de aquí!! —grita—

Vanya: —ríe— bien, te llamaré para la cena —se levanta y sale—

Rose: Nos vemos.

Luther: No necesitas gritar, hubieras ido y ya!

Rose: Agh! pero que delicado eres —rodando los ojos— solo llévate la cama.

Después de que su habitación volviera a la normalidad, Rose aprovechó el tiempo para poder descansar, relajarse y eventualmente caer en un profundo sueño, que no parecía tener final.