Capítulo 18.

2.4K 346 231
                                    



Capítulo dieciocho - Avances.

"Ella. Ella es un completo desastre, grosera, gritona, malaleche, incluso una rebelde pervertida... pero joder, pese a todo, a mí lo que me cautivó, fue cómo me comía la boca, y saciaba mis ganas, cómo me miraba; como si quisiera devorarme el alma de un solo bocado." —Flavio Montés.

🏫🏫🏫

—Tengo una puta hambre.

—Por dos —secunda Paty a Dorian.

Ruedo los ojos.

—No sean fastidiosos, ya les dije que está por venir.

—¿Y tengo que aguantarme las ganas de comer porque tu odiosa, perdón, tu diosa no haya llegado? —se corrige aposta. Agudizo mi mirada en su dirección.

—¿Y si no viene? Ya la había invitado antes a comer con nosotros y se negó rotundamente.

—Porque no la había invitado yo— puntualizo.

—No sé cómo puede caerte bien —se pregunta Dorian.

—No, la pregunta correcta es cómo puede Flavio caerle bien a ella —corrige Paty y le lanzo una papa frita.

—¡Si yo soy un amor!

Mis amigos se burlan de mí mientras yo recorro con la vista la cafetería en busca de aquella chica que no ha querido salir de mis pensamientos. Sigo rememorando cada segundo que pasamos encerrados en la biblioteca y aún puedo sentir el sabor de sus labios y lo calentita que estaba su lengua cuando se encontró con la mía.

Le pedí que almorzara con nosotros hoy porque quiero que se integre con mis amigos, que ellos la conozcan por ellos mismos y no por los tontos rumores que circulan en los pasillos del instituto.

Mis ojos la visualizan con una bandeja en mano buscando asiento, le doy un repaso visual y como siempre, quedo encantado con lo que veo; Jeans ajustados, camiseta holgada y corta, chaqueta ajustada de cuero, pero en esta ocasión lleva una gorra negra puesta.

Creo que se da cuenta de mi escrutinio porque de repente nuestras miradas chocan y no me queda de otra que sonreír inocentemente y hacerle señas con una mano para que se acerque.

Como es muy propio de ella, arruga su nariz respingona y duda, pero junto mis palmas como si estuviese rezando y le insisto hasta que camina hasta nosotros resignada.

—Eres un puto rogón —se burla Dorian.

—Cállate, puto barato —ordeno.

Se indigna y me da un golpe en la cabeza.

—A mí no me digas barato.

—¿Te indigna que te diga barato, pero no puto? —pregunta Patricia.

—Las cosas como son —se encoge de hombros y chocamos puño como cada vez que lanzamos referencias de memes.

La sangrona hace acto de presencia y saluda antes de sentarse en el asiento que me queda al lado.

—¡Por fin! —Exclama Dorian antes de empezar a atragantarse.

—Te estábamos esperando —digo.

—Bienvenida —habla Paty.

Miley solo asiente y comienza a comer de su plato de ensalada de frutas.

Dorian frunce el ceño cuando la ve.

—¿Solo eso te vas a comer? —bufa.

Yo sonrío disponiéndome a probar mi pollo frito.

Has llegado al final de las partes publicadas.

⏰ Última actualización: Aug 21, 2021 ⏰

¡Añade esta historia a tu biblioteca para recibir notificaciones sobre nuevas partes!

30 Días en detención ©Donde viven las historias. Descúbrelo ahora