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Apagó su molesta alarma, a la cual sintió más molesta que de costumbre porque estaba soñando que todo lo que le había dicho Jimin era una broma

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Apagó su molesta alarma, a la cual sintió más molesta que de costumbre porque estaba soñando que todo lo que le había dicho Jimin era una broma.

Tristemente, esa no era la realidad, el menor de verdad se había interesado en alguien más en su ausencia. Seguía sin entender cómo, si según él estaba dando apoyo moral a Taehyung así como él a Jungkook, ¿tuvo tiempo de coquetear? Había estado el fin de semana entero en una laguna de incógnitas, incógnitas que solo Jimin podía resolver pero que claramente no podía planteárselas sin dejar evidencias de su amor no correspondido.

Pero ya era lunes por la mañana y el tiempo de hacer conjeturas se había acabado para él, así que reunió todas las piezas de su corazón junto con un poco de valor y se levantó para empezar el día.

Al menos el mundo no se empeñó en hacerle la vida imposible, como soltar una tormenta o miles de inconvenientes que podrían hacerlo llegar tarde al instituto, de hecho era un cálido día soleado y el viento matutino le acarició el rostro hasta segundos antes de entrar al establecimiento. Se podía decir que lo único que empeoraba todo aquello eran sus pisoteados sentimientos.

—¿Hyung? —habló un moreno a su lado, su voz había sonado baja pero Yoongi aun así lo había escuchado y giró hacia él.

—Jungkook, qué raro, pensé que tendría que sacarte de la cama a rastras —y era verdad, estaba sorprendido de verlo tomar iniciativa para venir.

—Sí, se suponía que irías conmigo idiota, tu mamá me dijo que ya te habías ido —sonaba algo molesto, pero más que nada tímido.

—Lo siento, ¿sí? tengo la cabeza en otro lado. Mañana llámame después de levantarte, así no lo olvidaré —propuso, soltando luego un corto suspiro—. Pero qué bueno que vinieras, no me gusta comer el almuerzo con el grupo si no están Jimin, Taehyung y tú, es muy... ¿callado? sobre todo si cada uno estudia entre período y período de clases.

—No pensé que alguna vez te oiría decir eso.

—Sí, yo tampoco me lo creo.

—En fin, no tenía muchos ánimos de venir pero no llamé a Namjoon a las once de la noche para pedirle que me explique álgebra en vano, así que aquí estoy, listo para el examen.

—Así se habla campeón —palmeó su espalda levemente y lo alentó a caminar hacia su salón.

—De casualidad, ¿te pasa algo? te ves inquieto —era cierto, Yoongi estaba un poco más charlatán que de costumbre y caminaba a paso rápido. Lo cierto es que no quería quedarse a solas con sus pensamientos pero no podía admitir algo así en voz alta.

—Pasó algo —afirmó sin embargo—. Pero prefiero guardarme la ansiedad que tengo para el examen y luego te lo contaré mejor.

Jungkook lo miró confundido— Si tú lo dices...

En cuanto entraron al salón ya había varios alumnos sentados, algunos repasando con sus apuntes y otros perdiendo el tiempo. Taehyung era uno de ellos, y para desgracia de Jungkook se sentaban juntos en álgebra... y en todas las clases que compartían más o menos.

⇝ Compared || YoonMinDonde viven las historias. Descúbrelo ahora