Ramé (Borrador)

Capítulo 22

Hace alrededor de dos horas que trajeron a una chica con la cabeza cubierta por una funda negra, ya sospechaba quién era, pero hasta el momento en el que le quitaron eso de su hermoso rostro fue que reaccioné, porque si bien ya mi corazón presentía de quién se trataba, mi cerebro seguía negándose hasta el último momento.

Cuando la ví con sus ojos cerrados y su cabeza gacha, mirándose tan tranquila, sin saber aún el tormento que nos esperaba me sentí miserable. Es jodido que la mujer que amas se encuentre frente a ti, inconsciente y amarrada y que tú ni siquiera sepas que le hicieron para que esté así y aún peor, qué hicieron ambos para estar en ese lugar y para que esas personas les estén haciendo eso.

En primera instancia pensé que era un secuestro, pero por la forma en que me torturaban con esos cables me di cuenta que me odiaban y desde el momento en que ví a Valeria supe que esto iba mucho más allá de un simple secuestro para pedir dinero o algún ajuste de cuentas. Esto parece algo personal.

Desde que ella despertó mi mundo cayó en un pozo profundo y oscuro, como cuando piensas que nada puede estar peor que como está, ambos amarrados y secuestrados, basta ver el dolor en sus ojos para saber que nada te preparaba para lo que venía.

Nadie nunca te dijo que ibas a tener que ver a la mujer que amas llorando porque tú estás convulsionando en una silla, el único alivio que tengo de todo esto, es que quien está pasando la peor parte soy yo, y se podría escuchar estúpido, pero no, no me importa porque si tuviera que morir y volver a nacer para que ella no pase nada de lo que yo estoy pasando, sin dudarlo dos segundos lo haría porque Valeria es mucho más que el rollo de una noche o la chica con la que estoy hace un mes.

Valeria es la mujer que me demostró que detrás de cada persona se esconde un dolor, que ese mismo dolor a veces te obliga a actuar como no quieres, como actuó conmigo, pero la perdono, no le guardo rencor, porque mi Val ha tenido que pasar en esta vida por más cosas de las que yo mismo sé y no, no sé qué esconde tras esos ojos azules que reflejan tanta culpa pero el día que lo sepa la ayudaré a cargar con ese peso si así ella se siente un poco mejor.

Después de que se me pasaran los espasmos de la convulsión me inyectaron algo en el cuello y por más que lo intenté caí rendido.

Cuando despierto veo que frente a mí ya no está Valeria sino que hay una pantalla con un vídeo en pausa. No entiendo nada y ni le doy importancia, me pongo a tratar de girar y buscar como loco a Valeria. A un lado en el cuarto donde estoy hay una pared de cristal que anteriormente no había notado y detrás de ella puedo ver a una asustada Valeria mirándome, nuestras miradas se conectan y ni siquiera necesitamos hablar para decirnos todo lo que nos estamos diciendo.

Cuando giro hacia el lado, desconcertado porque el vídeo se está reproduciendo, aparece una foto de lo que parece ser Valeria más joven y otra chica y encima de la foto veo un letrero que me hace fruncir el ceño y cuando miro nuevamente a Val la veo con el rostro bajo y lágrimas saliendo de sus ojos.

"Llegó el momento de que se conozca el secreto de Carly"