🌸✨Flufftober✨🌸

Día 10: Drunk confession

🍺🍷🥃Thoughtful drinks🍸🍹🥂

1, 2, 3 tequilas. 4, 5, 6 vodkas, 7, 8, 9 mojitos. Era incontable cuántos tragos ya habían consumido todos los chicos que se encontraban en aquel bar. Estaban ¿festejando algo? No, simplemente estaban tomando por el simple gusto de beber o quien sabe, quizás alguno tenía alguna pena o preocupación, y aunque el alcohol no fuese la mejor medicina, a veces estar con los amigos, unas copas y buena risa harían que todo aquello que los tuviera preocupados, les alivianara su carga. Quizás después se preocuparán por la cuenta, la resaca y el dolor de cabeza, pero mientras tanto, sus risas inundaban aquel lugar.

— Y es que si no podemos con x’s materia, pues ya ni modo.
— ¿Cuál ya ni modo, tu, Kwon Soonyoung? Debes casi la mitad de tus materias y si sigues así, te van a sacar de la universidad y…
— ¡Pero es que ya me cansé, Cheol! Hubiera decidido ser idol en vez de esto — dijo aquel chico con ojos super rasgados bebiendo de golpe una cerveza.
— Este no sabe ni lo que dice — comentó un muchacho que al parecer era el más pequeño.
— ¡Tú compones canciones en tus horas libres, Jihoon! ¿No te ha pasado por la cabeza aquella idea donde podrías haber sido idol? Olvidándote de todas estas materias. Sólo i-ma-gí-na-te-lo
— No gracias, amo mi privacidad y todo lo que conlleva estar en ese mundo.
— Pero chicos, en serio ¿No han pensado algún escenario así? ¿Dónde sus problemas se solucionaran si se hubieran atrevido a hacer o decir algo que querían?
— No empieces con tus momentos filosóficos, Hoshi — había un chico de cabellos rubios algo largos, el cual servía a todos un shot de soju.
— Hoshi tiene razón — comentó Wonwoo acomodándose sus lentes. — el ¿Qué hubiera pasado si…? Muchas veces nos taladra la cabeza, pero ¿Qué es lo que nos detuvo de hacer o decir cualquier cosa, si realmente lo queremos hacer o decir?
— Ya le dieron cuerda a Wonwoo. — había un chico de nacionalidad china, este había dejado de tomar desde hace rato y habían respetado su decisión.
— Wonwoo tiene razón… — entre los 7 chicos estaba uno de tez más morena y con unos peculiares ojos con bolsitas en sus párpados inferiores, dándoles un aspecto felino; no había hablado en casi toda la reunión, y por ello los demás se impresionaron al escucharlo hablar.
— ¿Joshua? ¿Hablaste? Pensamos que te había comido la lengua el gato, ¿Verdad, Jeonghan? — dijo Cheol dirigiéndose al de cabellos rubios.
— Creo que has llegado a tu límite,  ¿no?
— Sólo… quiero otra ronda de tequila y nos vamos. — dijo el moreno poniendo su tarjeta de crédito en la mesa, al parecer, invitaría las últimas bebidas.

Durante esa ronda, Joshua se levantó al baño y detrás de él, fue Wonwoo. Los demás chicos sabían de la poca resistencia del norteamericano, por eso, Wonwoo se propuso como cuidador de los que menos sabían tomar.

— Joshua, ¿Todo bien? — preguntó apoyando su espalda en la puerta del baño.
— Ya estoy harto Wonwoo. Pero ¿Cómo decirlo?
— Sólo dilo, y ya. Si sale bien, qué bueno, si sale mal, por algo pasan las cosas. Y aquí estaremos por si sale mal o sale bien, pero si te quedas con eso, te va a seguir doliendo no decirlo.
— Te quiero y te odio amigo. En serio. — salió del baño Joshua tambaleándose un poco.
Cuando regresaron con sus amigos, sólo quedaban 2 chicos.
— ¿No me digas? ¿Hoshi ya quería ponerse a bailar en la mesa y por eso Jun y Jihoon se lo llevaron? — dijo Wonwoo sonriendo.
— Exactamente querido Wonucito. Y pues bueno ¿ya nos vamos? M está dando mucho sueño y…

Antes de que Cheol acabara su frase, Joshua estuvo a nada de caer en una mesa.

— Oh, creo que perdimos a otro.
— Yo me encargo de llevarlo. — propuso el rubio caminando hacia su amigo.
— ¿Seguro?
— Somos los únicos que vivimos a 3 cuadras de aquí, así que puedo llevarlo con calma.

Los 4 amigos se despidieron a la salida del bar, aunque Joshua balbuceaba más que articular bien una palabra. Jeonghan puso el brazo derecho de Joshua en su hombro ayudándole a caminar.

— Joshuji, creo que esta vez te pasaste mucho. Hemos salido a beber antes y bueno, siento que hay algo que te preocupa. ¿Todo bien?
— Je, sí, todo bien.
— Ajá, sí, todo bien y Hoshi no se cree tigre. Me preocupas, Shua.
— Sí, en verdad, todo va muy bien, aunque a estas alturas no sé si valga la pena…

El menor ya no dijo nada hasta que llegaron a la puerta de sus dormitorios. Ambos consiguieron un departamento para estudiantes, y como la renta se la dividieron, fue la mejor idea para poder ahorrarse algunos wons.

Entraron y lo primero que el rubio hizo fue dirigirse a la cocina y preparar un café bien cargado.

— Jeonghan… yo
— ¿Quieres vomitar? ¿Quieres ir a hacer pis?
— ¿Por qué es tan difícil decir lo que sentimos? — dijo el americano, dejándose caer al sofá de la pequeña sala que tenían.
— Pues no debería de serlo… ¿Qué te has estado guardando y por cuánto tiempo? — Jeonghan se acercó con una enorme taza de café con varios conejitos en ella. Vio a su roomie y este le miró con pesadez.
— Me da tanta pena decirlo… no quiero arruinarlo.
— ¿Pena? ¿Te robaste algo? ¿Mataste a alguien? Bueno, si es la segunda opción, te ayudo a esconder el cadáver y nos vamos a USA y desaparecemos, pero tú no eres capaz de eso… — con calma se sentó junto a Joshua y le dio pequeños golpecitos en sus ya muy rojizas mejillas.

La respiración de Joshua se hacía más rápida y sus manos comenzaron a temblar. Esto preocupó al más delgado y tomó con sutileza el rostro de su amigo.

— Joshua Jisoo Hong, puedes confiar en mí.

Sólo se escuchó un quejido salir de los labios del moreno y después de eso, unas lágrimas se hicieron presentes, rodando por sus mejillas.

— Me da miedo decirlo, porque quizás si lo digo pierda mucho y algo muy valioso, pero creo que no puedo esconderlo más. Cada que pienso en decirlo, me duele. Es una inseguridad tan… no sé cómo explicarlo, pero ya me cansé, porque también pesa mucho el no decirlo.
— Entonces dilo. Sólo dilo. Quítate ese peso de encima. — el más pálido miró decisivo al otro y este tomó un enorme respiro.
— Jeonghan… sólo prométeme que no cambiaras conmigo.
— Te lo prometo, Hong.

Joshua cerró fuertemente sus ojos y dejó que su pesar saliera por sus labios.

— Me gustas desde hace mucho. Me gustas Yoon Jeonghan. Y perdóname, ya que no debí de sentir todo esto por ti, porque eres sólo mi amigo. Eres mi amigo Jeonghan, y debería sólo de quedarme con el cariño que me tienes como amigo. Pero, pero oh Jeonghan, me fuiste gustando poco a poco, de los 6 años que llevamos de amistad, puede decirle que me di cuenta que me atraías hace unos 2 años… quizás confundí tus detalles y tu forma de quererme como amigo, y ah… el hecho de no ser correspondido también me dolía y preferí no decirte nada. Por pena y miedo…

Se hizo un silencio en toda esa habitación. Joshua comenzó a llorar un poco más hasta que sintió los labios de Jeonghan en su mejilla.

— Eres tan valiente… lo hiciste de maravilla. Con copitas de más, pero lo hiciste. — con una amplia sonrisa miró a su amigo y jugó un poco con sus negros cabellos. — Es difícil decirlo,  pero tú lo hiciste tan bien. Y bueno…
— Perdóname por arruinar nuestra amistad con esta estúpida idea que tengo.
— No es estúpida, porque no has arruinado nada. Sólo… que yo también había estado con un sentimiento raro. ¿Me está gustando mi amigo? ¿Hay algo de malo? Al principio reaccione algo parecido a ti, pero después, solo estaba pensando en el momento perfecto para poderlo decir… y sí, me gustas mejor amigo. Me gustas y mucho. — Jeonghan tomó la grande y gruesa mano de Joshua y le besó tres veces.
— No estés bromeando.
— No, no lo digo en broma… — el rubio clavó su mirada en los gruesos y jugosos labios de su amigo y dijo: — He tenido muchos sueños donde te besaba, y desde ahí comprobé que realmente me estabas atrayendo demasiado… y espero esto no sea sólo un sueño. — con calma, Jeonghan acercó su rostro y besó con ternura al menor.

Joshua se quedó anonadado pero también, dentro de él estaba que no cabía de felicidad. Fue un beso demasiado puro. Un simple contacto de labios.

— Te dije que no era broma, Jisoo.
— Jeonghan…
— Te quiero mucho, te quiero demasiado y gracias por decírmelo aunque estuvieras hasta el culo de ebrio.
— Perdón…
— Yo hubiera hecho lo mismo. — ambos rieron un poco, porque aunque fue difícil (y con la influencia del alcohol) pudieron sacar sus sentimientos el uno por el otro.

~~~~~~~~~~♡~~~~~~~~~~

Banditaaa :') hoy mi word felpó pero ando solucionando todooo!!

Ahora le doy las gracias a Kennchi por ayudarme con algunas ideas de para el día de hoy :') luv u babe!