Capítulo Diez

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Él se había quedado todo el día anterior con ella. Pero había regresado a primera hora de la mañana a la casa de su hermano. Ya que sabía que tenía a alguien a quien proteger.
Cuando Osman entró en la cocina a por un café, vio a Anne. Que estaba preparando los desayunos con algo de música clásica puesta.
Él se alegró mucho al saber que ella estaba por fin de buen humor y no quiso interrumpir lo que estaba haciendo. Pues él comenzó a oler demasiado bien.
Ella se giró para coger un plato del mueble de abajo y cuando vio a Osman se asustó y comenzó a respirar entrecortadamente por el susto.
―¡Joder! ¿Quieres matarme del susto, Osman?
―Buenos días, Anne ―dijo el sarcásticamente.
―Buenos días ―le respondió ella.
Ambos hicieron una breve pausa:
―¿Dónde has estado toda la noche?
―Eso no te incumbe. Recuerda que es mi vida privada.
―Ya veo. Habrás estado con ella cuando tu hermano solo sabe presionarme. Incluso hasta cuando me toca sin quererlo.
―¡Otra vez!
―Sí. Pero no ha vuelto a violarme. Pero pensé que estarías aquí para impedirlo.
―Lo siento. Anne. Nunca se sabe cuándo lo hará.
Pero ella no le dijo nada.
―¿Qué estás haciendo de desayuno?
―Tortitas con café.
―Vale.
Pero Osman no dijo nada.
Ella continuó haciendo el desayuno y Osman espero a ello.
Antes de que empezaran a desayunar, Demir entró en la cocina y estuvo gritándoles que qué hacían juntos. Hasta que Osman le calmó.
Después desayunaron tranquilamente en un completo silencio.
En breve, cuando acabaron de desayunar, Anne se marchó de nuevo a la habitación.

Ella camino hasta el departamento de Kilian. Ya que tenía que darle una noticia.
Katherine llegó y vio que su hermano estaba junto al piano, tocando la canción que le escuchó a Anne en la infancia.
Él dejó de tocar y se giró para ver a Katherine.
Ella se acercó a él y le dijo, mientras se sentaba a su lado.
―Tengo que contarte algo de Anne.
―¿Qué cosa?
―Tu golondrina herida estará esta noche en el restaurante más lujoso de Estambul con Demir.
―El que está en el sur. Aquel en el que...
―Sí.
Katherine hizo una breve pausa.
―Tu ya sabes lo que tienes que hacer, Kilian. Solo espero que ese tipo no te intente matar de nuevo.
―No lo hará. Ahora iré seguro. Pero no le digas nada a Roblas por favor.
Ella asintió.
―Tú mismo. Espero que ella regreso y seáis felices.
Pero Kilian volvió a tocar el piano y comenzó a pensar en cómo hacer que Anne la viese sin perder al bebe, mientras que Katherine se marchaba de su lado.
Sin embargo, Kilian supo cómo lo haría en el instante. Esperaba que Anne no le hubiese olvidado en esos tres meses.

Aysel llegó al departamento, después de salir a hacer unas compras para él.
Ella estuvo guardando la compra en la despensa, mientras que cogía su teléfono móvil del bolsillo y llamaba a Osman.
Cuando Aysel vio que este no le cogía, puso el teléfono encima de la cocina y continuó poniendo los alimentos en su sitio.
Después, Aysel se marchó a darse una ducha. Donde no dejo de pensar en que estaría haciendo Osman para que no le cogiese el teléfono.
Y cuando regreso al salón, ella se relajó leyendo un libro hasta la hora de cenar.

Un poco más tarde, Demir entró en la habitación de Anne para ir a buscarla. Ya que quería cumplir su promesa de sacarla a cenar.
Cuando la vio que se había puesto un vestido corto de color negro, pensó que había estado ciego cuando la tuvo como su novia.
Él no supo que decirle. Solo puso su hombro para que ella fuese agarrada del brazo, pero Anne no se lo cogió.
Ambos se marcharon del lugar a los pocos minutos.
Cuando llegaron al restaurante media hora después; el metre les hizo pasar a una mesa y Demir pidió un buen vino. Pero para Anne pidió una botella de agua.
Después, le entregaron la carta y Demir pidió algo no muy pesado para los dos.
Cuando el metre se marchó, Demir le dijo:
―Espero que la cena este de tu agrado.
―Ya sabes lo que opino yo de tus cenas. Sabes que las odio con toda mi alma. Pero al menos me distraigo.
―Eso me lo dirás después en casa.
Ella hizo una pausa.
Anne se levantó de la mesa. Sin embargó, Demir se levantó enseguida y le paró.
―Demir, voy al baño. Necesito hacer ya sabes.
Demir soltó a Anne y ella fue al baño.
Cuando ella entró en breve, se lavó la cara. Y cuando miró al espejo, casi se cae de culo al ver el rostro de Kilian.
―Tu eres un fantasma ―dijo ella―. Tu estas muerto.
―No lo soy ―le respondió.
Anne se giró y vio que Kilian estaba ella.
Él se acercó a ella y le beso para que Anne viera que era verdad que él estaba ahí y vivo.
Kilian dejó de besarla y ella dijo exhausta.
―¿Cómo es posible?
―Sobreviví al disparo. No sé con qué valor, pero lo hice.
Hicieron una pausa.
―¿Cómo esta nuestro hijo?
―Él está bien.
Ambos volvieron a besarse y después él le dijo:
―Regresa con Demir. Te prometo que te sacare de ese infierno.
―¿Por qué estas pidiéndome eso?
―Por qué no quiero que él sepa que estoy vivo. Todo para él tiene que ser una sorpresa como lo fue para ti.
Ella asintió.
Anne le besó por última vez y salió del baño.
Cuando estuvo ante Demir de nuevo, sonrió por primera vez en tres meses y él se extrañó.
―¿Qué te ocurre? ―le preguntó él―. Estabas desazonada y ahora te veo mejor aspecto.
―Nada. El agua fresca me habrá sentado bien.
―Espero que sea eso y que...
Demir se preguntó que pasaba y cuando vio quien grito, se asustó.
Él sacó su pistola como pudo, pero el asaltante se la quitó enseguida de una patada y cogió a Anne del suelo.
Después le pegó una patada muy fuerte a Demir y mientras que él se retorcía por el dolor, este le dijo al oído:
―Esto es un regalo de tu buen amigo Álvaro Espinoza.
Y ese hombre se llevó a Anne. Sin embargó, Demir continúo retorciéndose.
Cuando llegaron a la puerta, ese hombre durmió a Anne y la montó en el coche.
Y arrancando en breve, se marchó de los aparcamientos del restaurante.
En cambio, Demir intentó recomponerse y cuando lo hizo, se maldijo por no haber impedido el secuestro de Anne por su enemigo. Álvaro Espinoza.
Y mientras que pensaba con claridad como actuar, vio una sombra de muchas. Como también debía de ser para él, un fantasma que no mato a su tiempo. Fue cuando él pensó que le necesitaría a su lado para salvar a Anne. Aunque supiera que Kilian Riaza fuera un estorbo para sus planes

Éxtasis Ocultos (Mi Amuleto #4)Where stories live. Discover now