Rebeldía/ Love 101.

-Capítulo 9-

—¿Qué quieren?—exclamo Malia llegando junto a Sinan y Eda a la parte trasera del edifico escolar, ahí los esperaba Kerem y Elif.

—¿Nos buscabas?

—¿Y Osman?—preguntó Elif.

—¿Y a quién le impor...—al ver a su ex novio llegar agregó con veneno—: Oh miren, el empresario llegó.

Osman no dijo nada, ninguno de los rebeldes dijo nada.

—¿Me buscaban?

—Nos llamó a todos. Usando tu red de nerds.

Malia se recargó en la pared junto a Sinan sin dejar de dirigirle una mala mirada a Osman y a la chica nueva, Eda y Kerem no entendían su comportamiento, ellos dos habían estado tan metidos en su relación y problemas que simplemente no se dieron cuenta de lo que pasaba a su alrededor con Malia.

—Váyanos al grano—intervino Kerem—. ¿Qué sucede?

—¿Qué van a hacer para ayudar a Isik?—respondió Elif—. Necdet es el director. Su plan fracasó.

—¡Bravo! Gran observación.

—Creí que esto les importaba.

—Claro que sí. No hay nada más importante.

La castaña suspiró aburrida llamando la atención de los presentes.

—¿Por qué te importa a ti, Elif? Ni siquiera conoces tan bien a Isik como nosotros—dio un paso al frente alejándose de la pared, viendo a la nueva—. Oh ya entiendo. Ya entiendo. Sólo quieres quedar bien con Osman. Finges interesarte cuando en realidad...

Sinan tomó la mano de su amiga, deteniendo aquellas palabras llenas de veneno. Malia lo miro, en sus ojos casi se podía ver la lucha interna entre ambos, al final la chica cedió y volvió a situarse junto a su amigo.

—Un momento, ¿qué es lo qué pasa?—comentó Eda, confundida.

—Nada. No pasa nada—respondió Osman sin poder ver a su ex novia.

—Entonces, ¿qué harán?

—No sabemos, Elif—dijo Kerem—Osman ha estado muy raro. Intentamos pensar en un plan.

—Yo no lo veo tan mal—comentó Sinan—Osman, piensa en algo.

—Si supieran lo desesperado que estoy por...—el chico miro brevemente a Malia, agregando—:  encontrar una solución.

—¿Qué fue lo que te paso?—cuestiono Eda, volteó a ver a su hermana— ¿Sabes que le pasa?

—No, tal parece que no sé lo qué pasa con Osman desde hace un tiempo.

—¿A qué te refieres?

Malia se removió incómoda en su lugar, cansada.

—Okey, iremos a ver a Isik está noche, si tanto te importa puedes venir, Elif—anunció Kerem.

La chica le dirigió una última mirada a su amigo antes de dar la vuelta e irse del lugar, sentía que iba a explotar en cualquier momento.

—Malia, ¿qué pasa?—exclamó Eda a sus espaldas, junto a ella venía Kerem y Sinan.

—¿Malia? ¿Qué sucede?

Tras las preguntas de Kerem y Eda, Malia explotó:

—¡¿Por qué?! ¡¿Por qué no me lo dijeron? ¡Todos lo sabían y ninguno me dijo nada!

—¿De qué estás hablando, Malia?—cuestiono Eda.

La ira de Malia fue convirtiéndose en tristeza, dolor, y las lágrimas comenzaron a caer poco a poco por el rostro de la chica.

—¡Ninguno me dijo que Osman sentía algo por Elif!—tras un leve sollozo, exclamo—: ¡Creí que eran mis amigos! ¡Creí que nos apoyábamos los unos a los otros!

—Malia, tranquila...

—No, Sinan, no. Pensé que... bueno, ya veo que lo que pensé fue un error.

Ninguno de los rebeldes dijo nada, Sinan sabía que debía ser cuidadoso con las palabras que le decía su amiga en estos momentos, Kerem y Eda estaban impactado al ver a su amiga y hermana, respectivamente, en esas condiciones.

Sinan se acercó a Malia, tomó su mano con cuidado y poco a poco la abrazó, justo en el abrazo, cuando Malia enfocó sus ojos llenos de lágrimas en un punto fijo detrás de Eda y Kerem, en una persona más específicamente: Osman.

Los sollozos dejaron de oírse y las lágrimas comenzaron a ser completamente silenciosas. Y al ver a Osman, Kerem y Eda observándola fue cuando lo entendió, cuando comprendió ese sentimiento que había rondado por su corazón todo ese tiempo: traición. Y eso fue lo que más le afectó: sentirse traicionada.