Capítulo 18 "Primer acercamiento"

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Mina observaba detenidamente a la castaña frente a ella. Sonreía de una forma sumamente brillante, quizá Mina estaría conmovida y hasta cierto punto, fascinada con aquella sonrisa de conejo, de no ser por lo que llevaba en brazos.

Aquel era el primer día que Nayeon se encargaría de cuidar de Tzuyu. La japonesa estuvo aliviada cuando Nayeon la llamó para informarle que oficialmente había dejado su empleo en JYPink y que podría comenzar a encargarse de Tzuyu tan pronto terminara de ordenar algunos asuntos. Durante ese periodo de tiempo, Mina estuvo ansiosa y nerviosa, pues bien sabía que Tzuyu no estaba del todo feliz con la situación y que la aceptaba únicamente para poder estar con ella más tiempo.

Ver a Nayeon ahí frente a su puerta a las 9:00 AM con una pequeña sorpresa en brazos la dejaba algo inquieta.

-¿Mina?- Nayeon la llamó por su nombre, estaba preocupada de lo que pudiera estar sucediendo en la mente de Mina o de si estaría de acuerdo con su sorpresivo invitado. Se maldijo mentalmente por no haberle preguntado a la japonesa si estaba bien. Se sintió culpable.

-Vaya... no espere a este pequeño- fue lo primero que salió de los labios de Mina, quien se agachaba un poco para mirar a la pequeña bola de pelos en los brazos de Nayeon.

-Lo siento ¿Estás molesta?- preguntó rápidamente Nayeon, a lo que Mina simplemente le dedicó una tenue sonrisa mientras la miraba.

-Tranquila, solo fue sorpresivo, estoy segura que Tzuyu estará contenta de llegar y verlo- aclaraba Mina mientras acariciaba la pequeña cabeza del pomerania blanco y esponjoso que Nayeon cargaba en brazos.

Nayeon entonces se sintió aliviada de la respuesta de Mina, sabía que la japonesa no era muy afin a tener mascotas, no desde que su cachorro Ray-chan se había perdido cuando tenía 14 años. Pero realmente aquel pequeño polvoron esponjoso era necesario para ella, de alguna manera le ayudaba a no estar tan nerviosa ante el inminente momento de estar a solas con Tzuyu en aquella enorme casa.

Era su compañía.

-Me aseguraré de que no haga ni un solo destroso, yo me haré responsable de cualquier cosa- dijo la castaña, tratando de hacer sentir segura a Mina al respecto, después de todo llevo un perro a su casa sin preguntar. -Y espero que aligere las cosas entre Tzuyu y yo- confesaba, ganándose una mirada curiosa de Mina.

-Así que es eso... Es nueva adquisición, ahora entiendo porque no lo ví en tu departamento- Como pensó, Mina definió rápidamente eso, después de todo era hija del prodigioso médico Myoui...

-Lo siento, debo verme patética, abrumada por una niña de 12 años- se sentía sumamente apenada de haberse visto atrapada por Mina, pero la japonesa simplemente se acercó hasta ella y acarició su espalda.

-Tranquila, entiendo perfectamente tus nervios. A decir verdad, cuando Tzuyu llegó a casa por primera vez, también fue abrumador para mi- Mina comentaba con cierta melancolía todo para después suspirar. - En fin, se que a pesar de tus nervios harás un gran trabajo. Al pequeño puedes dejarlo salir al jardín trasero, estoy segura que le gustará- comentaba Mina mientras llamaba a Nayeon con uno de sus dedos y le daba un breve recorrido en el hogar.

Nayeon bajo al pequeño cachorro sin nombre y siguió a la abogada alrededor de la casa; todo estaban tan limpio y ordenado, justo como recordaba que era la pelinegra.

-Tzuyu llega a las 4:00 pm a casa, hay comida hecha en el refrigerador, pueden comer juntas cuando llegue. También hay ingredientes por si deseas cocinar algo por tu cuenta- Comenzaba a explicar Mina. -los viernes dejo un poco de dinero sobre la nevera, es día de película, así que Tzuyu ordena una pizza y vemos una película juntas- señalaba el sitio donde dejaba dinero Mina.

Quédate a su ladoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora