Capítulo 30 "Adiós, amor de mi vida"

270 30 46
                                    

Chaeyoung permanecía recostada en su camilla aquella noche, había retirado las puntas nasales que le daban oxígeno para descansar un momento. Odiaba usarlas, odiaba estar conectada a todos esos aparatos que la ayudaban a estar viva, odiaba el dolor que sentía día con día.

Miraba sus brazos, todos llenos de hematomas por las constantes punciones. Maldijo una vez más en la tarde cuando vio el estado de su piel.
Estaba a la espera de su revisión para poder dormir, pues también detestaba que los médicos y enfermeros la despertarán para revisarla.

Soltó un dificultoso suspiro más, su pecho dolía cuando lo hacía. El médico anteriormente le había dicho que los pulmones no sentían dolor, pero él no imaginaba el horrible dolor que ella sentía al respirar a profundidad...

-No tiene ni idea...- susurro para si misma mientras colocaba su mano en su pecho, como un intento de aliviar su malestar.

No pasó mucho para que una de las enfermeras que la cuidaban en la noche, ingresara a la habitación, ella tenía preparado un par de medicamentos que ni siquiera quería seguir tomando.

-Señorita Chaeyoung, ¿Cómo se encuentra esta noche?- la saludaba la profesional dedicándole una sonrisa.

-Con ganas de no despertar...- fue la fría respuesta de la artista, sin despegar su vista de la ventana.

La enfermera no respondió a eso, solo mantuvo silencio mientras preparaba una nueva solución para conectarla a Chaeyoung. Para todos era difícil la situación de la rubia.

-Desearía poder hacer más que medicarla, señorita... Todos lo deseamos realmente- después del silencio, dijo aquello con total sinceridad.

-Ayudarme a irme dignamente sería grandioso- sonrió instintivamente, ya sabía lo que la mujer de blanco le diría.

-Lamento no poder ayudarla con eso. La eutanasia sigue siendo un tema delicado en todo el mundo- aclaró la mujer.

-Lo sé... Es una lástima- y sin querer hablar más, simplemente giro su rostro al lado contrario de dónde la enfermera colocaba la medicación.

Solo sintió el movimiento de su equipo intravenoso y el frío líquido ingresar a su cuerpo. La sensación se había vuelto tan familiar que había dejado de incomodarle hace mucho.

Fuera de la habitación, comenzó a sonar un comunicador, llamando a la mujer que había entrado a atenderla. La enfermera se puso de pie y se dirigió a contestar.

-Oncología, piso 2- dijo al contestar.

Chaeyoung escuchaba todo con completa calma desde su habitación. No le agradaban las conversaciones del personal, por lo que simplemente se volvió a acomodar en su camilla y encendió el televisor de la habitación para ver las noticias.

-Por supuesto, ya le aviso- y colgó la llamada.

Seguido de ello, la enfermera se dirigió a una de sus compañeras.

-Te necesitan para instrumentar una cirugía de emergencia en el quirófano de traumatismo- informaba a su compañera que se ponía de pie.

-¿Que es esta vez?- preguntó.

-Una mujer de 27 años, necesita una extracción de proyectil- informó.

-Voy para allá- y sin más, la conversación de ambas terminó.

Chaeyoung escuchó aquello. Pobre mujer, se imaginaba lo horrible que era ser atacado de esa forma. Soltó un suspiro más y siguió mirando el noticiero.

-En otras noticias, el CEO de la famosa compañía Sunrise entretaiment, Jung Haesol, fue hospitalizado, luego de ser abatido por la jefa del MP en Seul, Park Jihyo. Esto tras el intento de homicidio del CEO contra una de las abogadas defensora en el caso de lavado de dinero en el que la compañía se vio envuelto hace un par de meses. Las autoridades reservan el estado del CEO, mientras que, la abogada y heridos, fueron trasladados al hospital para ser atendidos. En breve, más detalles-

Quédate a su ladoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora