El regreso a clases, nuevas relaciones, nuevos chismes, y lo más importante, un cambio de administración en el pueblo van a llegar a poner de cabeza la ya de por sí loca vida de nuestros amados personajes.
Parte 2 de Me Quieres o Me Olvidas. Del AU...
Banda perdón por el retraso, pero es un capítulo re largo así que se compensa jsjs los tkm
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A pesar de que ya era otoño, ese día había amanecido bastante nublado y con una llovizna de esas que parecen no ser muy fuertes pero que mojan mucho y hacen que se sienta mucho frío.
Fugo se había puesto una sudadera verde bajo la azul marino del uniforme, esperando que el prefecto no se diera cuenta, porque no quería que se la quitaran. Que el cierre de su vieja sudadera del uniforme estuviera roto no hacía más fácil ocultarla.
El rubio se encontraba sentado en uno de los escalones para subir al segundo piso. La profesora de esa hora no había asistido, y como era una mañana fría, nadie quería salir del salón, y a Fugo no le gustaba pasar más tiempo de lo necesario con sus compañeros.
El profesor Jonathan le había dicho que tenía que ser más sociable y todo eso, pero la verdad se lo estaba tomando con calma. Es decir, tampoco estaba mal no querer convivir con nadie, ¿no?
Así que ahí estaba, con la espalda recargada en la pared mientras escuchaba música en su celular. No se estaba relajando del todo, porque su audífono izquierdo del tianguis ya estaba haciendo falso contacto y se escuchaba todo culero, pero pues ¿ya qué hacía?
Precisamente eso fue lo que le permitió escuchar pasos que venían bajando de la escalera. Iba a hacerse a un lado para dejar a esa persona pasar, cuando vio que se trataba de Ermes.
La chica no le dijo nada, solo se sentó junto a él. Fugo se quitó los audífonos, diciendo:
—Hola
—¿No tienes frío aquí afuera?— preguntó ella, frotándose las manos
—¿Tú sí?
—Un poco. ¿No quieres venir al salón? Jolyne está jugando vencidas con Trish
—¿Y quién está ganando?
—Tienes que venir a averiguar
Fugo sonrió y soltó una risita ahogada. Admitía que le intrigaba saber ese resultado.
—Hay mucha gente allá— se excusó Fugo, pasándose una mano por su despeinado pelo rubio distraídamente
—Te quejas demasiado— observó Ermes
—A ti tampoco te gusta estar entre tanta gente, ¿o qué haces aquí?
—Pues quería hablar contigo
Fugo se puso un poco tenso. Ay no, ¿Ermes ya sabía lo que había ocurrido con Jolyne? Peor aún, ¿si no lo sabía significaba que Jolyne la estaba engañando o algo así?
Ermes se frotó los brazos, tratando de calentarse. Sin decir nada, Fugo se quitó su sudadera del uniforme y después la verde.
—No hace tanto frío— comentó Ermes, al ver que el rubio le estaba ofreciendo la sudadera verde
