Capitulo 5

850 127 14
                                    

— Yo... Realmente no lo sé.

Sunoo no dijo nada.

— Creo que... Apenas y sé cómo te llamas, no puedo decirte si eres rival para él y yo creo que... Es la pregunta menos apropiada para alguien que lleva tanto tiempo enamorado.

El menor desvió la mirada y asintió, dándole la razón. Sunoo también coincidía en cada palabra pronunciada por Heeseung, en caso de haber contestado algo diferente, hubiera sido una estupidez.

— ¿Quieres bailar?

— No soy muy bueno bailando.

— Oh... Está bien.

Heeseung se reprendió treinta veces por segundo tras la pequeña conversación, se había acercado a Sunoo para invitarlo a bailar y terminó siendo él rechazando la invitación del menor.

La incomodidad protagonizó el momento, ninguno de los dos dijo una sola palabra más, solamente se mantuvieron en un profundo silencio.

La noche siguió transcurriendo con normalidad, y cuando el reloj marcó las 03:00 a.m. finalmente la gente comenzaba a abandonar el lugar, quedando por último aquel grupo de amigos, totalmente agotados.

Definitivamente el apogeo de más de ochenta personas no se comparaba con la simple presencia de siete en aquel antro, pero ahí se encontraban, los siete amigos seguían con la amena charla hasta que finalmente optaron por volver a casa.

Agradecían vivir en el mismo barrio, a excepción de Jungwon, quién dormiría con Riki, y se encaminaron hacia sus hogares haciéndose mutua compañía.

La fiesta parecía seguir entre ellos, caminaron por la avenida entre una charla animosa y varias bromas. Heeseung cargaba en su espalda a Jungwon, quién estaba agotado de tanto bailar.

Apenas dos calles antes de sus hogares, Jungwon bajó de la espalda de Heeseung, uniéndose a la conversación entre Jake y Jay.

Fue cuando Heeseung se permitió observar el resto del panorama. Riki y Sunghoon iban a la cabeza, jugando entre ellos, Jungwon, Jay y Jake conversaban de sabrá Dios qué, mientras reían.

Pero... ¿Y Sunoo?

Heeseung giró un poco la cabeza, por fin notó la presencia de Sunoo, al final del grupo, solo observando con una expresión tranquila cómo los demás sonreían y bromeaban.

Heeseung no recordaba a Sunoo como un chico tímido o introvertido, al contrario, tenía de él una imagen divertida, de alguien a quien le gustaba siempre jugar y hacer bromas.

Tal vez en ese momento Heeseung entendió que Sunoo no estaba pasando por un buen momento.

Se detuvo unos segundos, esperando a que Sunoo llegase a su lado, cuando por fin lo tuvo a la par, lo rodeo con su brazo por los hombros.

— ¿Qué pasa, Sunoo?

El menor sonrió.

— Solo... Estoy un poco cansado, tal vez.

— Desde el inicio del evento has estado así — susurró — ¿Hay algo en que pueda ayudarte? No creo que estés pasando por un buen momento.

Sunoo reflexionó cuidadosamente esas palabras, semanas antes su profesora de inglés le había dicho algo similar, al parecer el problema de Sunoo no era solamente haber perdido buenos hábitos estudiantiles, si no que iba más allá.

Pero él no podía ver cuál era el problema.

— ¿Es por Jay?

— ¡No, por supuesto que no!

— ¿Seguro?

— Totalmente. — algo dentro de Sunoo le reprochaba, algo dentro suyo decía que la situación con Jay si le afectaba.

Pero era demasiado ciego, se había aferrado fuertemente a Jay, con la esperanza de algún día ser correspondido, pero su parte racional siempre se empeñaba en hacerle ver qué Jay únicamente le tenía cariño similar al de un hermano, lo cuidaba y lo consentía.

Tal y como lo haría un hermano.

Pero nunca era suficiente, a Sunoo parecía gustarle la idea de vivir el resto de sus días aferrado a un amor casi imposible.

— Sunoo. — lo llamó — Si necesitas ayuda con algo... Tal vez...

Las palabras se habían quedado atoradas, ¿Qué le pasaba?

— ¿Tal vez...?

— Tal vez... Seguramente que alguien te ayudará no pierdas la esperanza.

El menor soltó una sonora carcajada, para después decir: — Por supuesto, Heeseung, por supuesto.

— Deberíamos hacer más fiestas de este estilo. — sugirió Riki.

— No soy fan de las multitudes, pero supongo que es buena idea. — agregó Sunghoon, seguido de Jungwon, quién expresó:

— Heeseung tampoco es fan de lugares con un alto número de personas.

Por supuesto que aquello no era un secreto, al pobre Heeseung ya le costaba trabajo intentar congeniar con una sola persona, no creía poder con más de diez en un mismo día, en un mismo lugar.

— Vale, no tengo problema con que sea algo privado, solo nosotros siete. — postuló Jay.

— Podríamos hacerlo este mismo fin de semana, en mi casa, mamá cocinará para nosotros, estará encantada. — ofreció Jake esperanzado de poder mostrarles su hogar a su grupo de amigos.

— No tengo inconveniente.

— Perfecto, — habló Jay — veámonos este fin de semana en la casa de Jake para tener una pequeña fiesta y pasar tiempo juntos. — miró a Jungwon.

— ¿Qué opinas Sunoo? — Heeseung quién había notado que a Sunoo no lo tomaban en cuenta, pidió su punto de vista sobre la reunión.

— Yo... Tengo un pendiente escolar. Pero no sé preocupen, estaré ahí.

— Sunoo, no quiero que tengas más faltas en la escuela.

El mencionado se sintió cohibido por la evidente preocupación de Jay, pero finalmente se permitió responder.

— No hay de qué preocuparse, Jay, me aseguraré de cumplir en tiempo y forma.

Jay le sonrió, y junto con los demás, retomaron su camino a casa.

Sunoo volteó hacia Heeseung y le sonrió en agradecimiento. Heeseung hizo un esfuerzo sobrehumano por devolver la sonrisa con la misma dulzura.

Aunque falló un poquito en el intento.

Yo me enamoré primero || ENHYPENWhere stories live. Discover now