Domingo » Juan Pablo Villamil (Morat)

42. Segunda primera cita

Él llevaba su equipaje a cuestas

Ella iba con angustias viejas

Se encontraron frente a frente

Con las ganas indomables 

De una historia diferente...

(Una historia diferente - Santiago Cruz ft Dani Martin)

Septiembre

Semana 3

Juan Pablo Villamil

- Niño, ayúdeme. Se lo suplico – Le imploro mientras lo enrollo con mis brazos para impedirle irse

- Villamil, usted es un adulto. Puede escoger solo su ropa – Se queja Martín – Tengo que trabajar en las gráficas de su banda

- Le estoy rogando – Señalo, uniendo las manos en señal de oración – Es mi primera cita real con Pick, y no sé qué putas ponerme

- Ay, que orgullo. Nuestro Villaco tiene una cita y va a dejar de ser virgen – Señala Isaza con expresión soñadora mientras me mira desde el sofá de mi sala, donde está terminando una partida de COD en la que me mataron hace horas. Lo ignoro

- Si apareciera desnudo, ella estaría más contenta – Es todo lo que se le ocurre apuntar a Martín. Lo miro con rencor

- Que hijo de puta – Reniego - ¿De qué me sirve tener un amigo que sabe de moda si no va a compartir su sabiduría?

- Ayúdele, Marto. Quiere verse lindo a ver si la niña por fin le da un besito – Se burla Isaza sin piedad

¿Por qué hice una elección tan pobre de mejores amigos?

Quiero gritar. ¿Qué se supone que significa que me vista formal?

Simón aparece tranquilamente desde mi habitación y me tira a la cara una bola de ropa.

- Ay, ¿Qué le pasa? – Reniego

- Todos sus trajes son como de profesor de matemáticas de la Nacional – Señala Moncho – En serio, Villamil. Ganamos bien. Cómprese un traje decente. Si yo fuera Pick, no lo sacaría ni a la esquina en esos trajes de predicador que tiene

Bajo la vista a la ropa que cayó al suelo, porque la verdad es que no puedo defender mis trajes.

Simón me eligió un pantalón negro sport, un buzo de cuello tortuga negro que estoy bastante seguro de que es de Marto y un blazer gris.

Vaya. Eso es tener talento.

- Perfílese esa barba, que parece un schnauzer – Continúa Simón con su regaño – Péinese un poquito, y va a quedar decente a ver si Pick decide que siempre si se va a conformar con usted

Isa y Marto se ríen, celebrándole el chiste de mierda.

Le muestro el dedo medio, pero recojo la ropa humildemente porque es una buena elección, y por lo menos Simón me está ayudando.

Los dejo en mi sala haciendo lo que demonios sea que hacen, porque terminamos de discutir las paletas de colores y el concepto para las fotos del disco hace rato. Cuando salgo de ducharme, ya con la barba perfilada y el pelo bien peinado, como me instruyó el único Vargas con cerebro, los 3 están sentados en mi cama como quinceañeras.