Mi perfecta Jennie

4. 🧸

Los próximos días pasaron rápidos, llegando a mí los sueños recurrentes de siempre, volví a caer en mi tristeza, esa que nunca se iba, esa que tenía nombre y apellido.

¿pero por qué regresaba ahora con más fuerza?

Desde que la vi en la iglesia no podía dejar de pensarla, de buscarla con la mirada en el instituto, de desear que ella volteara a mirarme y rompiera esa cadena que me ataba a un imposible, Rosé me decía que quizás eso era una señal de que algo pasaría, debía admitir que mi omega estaba inquieta más que nunca, pero no prestaba atención a eso.

—Jennie, ¿estás poniendo atención a lo que estoy diciendo? — Yoon Gi me llamo, lo mire sin saber que decir, porque no, no estaba prestando atención

—Lo siento Yoon, estoy con otra cosa en mi mente, ¿qué decías?

—Sobre el baile, aunque si no estás en condiciones sin problema podremos atrasarlo

—Lo que quiera Jennie— dijo otro de mis compañeros

—Jennie ¿necesitas algo? — me pregunto Jongin

—¿Qué te traigo?— Dylan me miró preocupado

Y de repente tenía a todos mis compañeros varones preocupados por mí, quise hacer una mueca por eso, me sentía muy incómoda, pero solo sonreí y negué 

—Oh vaya apenas dijo algo y ya están arrastrándose por ella? Controlen a sus animales — dijo Rosé llegando a mi lado,  ella tan sincera como siempre

—Ok....yo...creo que estoy bien, gracias solo necesito descansar...podremos hacer esto mañana— Ellos suspiraron y asintieron 

—Si necesitas algo no dudes en decirme

—Y a mi

—A mí también Jennie— asentí y tomé mi mochila, Rosé me siguió

—Esos chicos están locos y raros— se burló — debes hacer algo

—Lo sé, ni yo sé qué pasa con ellos

—Es claro que gustan de ti— dijo como si fuera lo más evidente, aunque yo tenía mis dudas

—Da igual, comienza a estresarme—  era verdad, ellos eran raros, unos chicos muy raros, pero tenía que aceptar eso porque yo era parte del consejo estudiantil y bueno...me gustaba organizar todo, pero últimamente esa actitud me incomodaba

—Deberías dejar en claro que no tienes interés en alguien, o que tu mamá no te dejaría ni en mil años acercarte a alguien, aunque eso no es mentira

—Lo intenté, pero parece no funcionar

—entonces seguirás atrapada con un montón de nerds esperando por una oportunidad

—No les digas así, además más tarde se aburrirán de mi

—Eres Kim Jennie, nadie se aburre de ti

—Que te parece dejar de hablar de mí y mejor vamos por el almuerzo — ella asintió emocionada y tomo mi brazo para arrastrarme hasta la cafetería

Caminamos  hasta la cafetería, tome un sándwich y fresas picadas con una malteada y salí, creía que almorzaría con ella pero Rosé tuvo que ir a la dirección, no sabía que había hecho pero esperaba no fuera algo serio, decidí que iría a la biblioteca, eso después de dejar algunas cosas en mi casillero, coloqué mi clave y lo abrí, pero entonces ese olor lleno mis fosas nasales, no era ni muy femenino ni muy masculino, era pino y jabón de fresa, absolutamente perfecto.

—Hola— esa voz, se parecía a una persona que conocía bien, cerré el casillero un poco y casi me fui de espaldas

—Ho...la — susurre muy muy afectada, era ella, sonrió levemente y me quede muda, la sonrisa más hermosa que he visto en mi vida

—Eres Jennie, ¿no es así? — asentí, pude ver cómo mirabas mis labios, casi me atraganté con mi propia saliva

—Soy Lalisa, quería preguntarte algo importante— pude ver sus fuertes brazos cuando los cruzo y sus manos tatuadas, ella era tan atractiva

—¿Hice algo malo? — dijo nerviosa, pero que tonta, ¿hacer algo malo? 

Tonta

Tonta Jennie

—¿Por qué harías algo malo?— me preguntó con un toque de gracia en sus palabras, seguro quede como tonta ante ella

—Uhhh, no lo sé, lo siento — estaba nerviosa y mucho, pero como no estarlo con ella, mi eterno interés amoroso hecha mujer, ella estaba ahí y yo moriría lentamente si descubría que mi ritmo cardiaco no estaba bien y que mi omega se volvió loca con su presencia

—no hiciste nada malo, solo quería preguntarte ¿puedo almorzar contigo?

—¿Qu...é? — sin creer lo que estaba diciendo abrí la boca asombrada, si antes estaba casi hiperventilando ahora lo estaba haciendo aún más

—¿Dónde almuerzas Jennie?

—Yo....yo....en la biblioteca...ahí...— baje la mirada  sonrojada— hay un lugar y yo....almuerzo ahí....

Mire sus ojos con toda la extensión de los míos, esos ojos marrones eran sin duda mi perdición

—Está bien, entonces ¿Puedo almorzar contigo? — volvió a preguntarme

—Si...quieres — sonreí avergonzada

—Quiero — se acercó un poco, ella me miró intensamente, colocó su mano en un mechón de mi cabello y se alejó, esto era más de lo que podía soportar, es que no podía asimilar algo así, en el canino hasta la biblioteca varías miradas estaban en nosotras, sabía lo raro que era esto, Lalisa a mi lado era un poco más grande, me sentía intimidada, sentí su mano en la mía haciendo que la mirara

—¿Estás bien?

—Si — lo dije muy bajo

—¿Estás nerviosa? — me pregunto intento calentar mis manos frías

—Las personas nos ven — señalé lo obvio

—Se acostumbraran— su respuesta fue contundente, ¿acostumbrarse? a caso esto pasaría seguido

Al entrar en la biblioteca mi inquietud se calmó un poco, ya no sentía miradas en nosotras, ahora lo que me mantenía nerviosa era solo su presencia, pero no de algo malo, sino de que era mi Crush y estaba aquí conmigo, sola.

—Aquí es— le indiqué nerviosa— está bien si no te gusta estar aquí podemos ir a un lugar afuera

—¿Te sientes cómoda aquí? — esa pregunta me gusto bastante

—Es tranquilo

—Aquí nos quedaremos entonces, además es mejor— acomodo las mochilas en el suelo — por que estamos juntas y nadie nos molestará

Eso último me hizo sonrojarme, juntas....solas...

Ella pareció examinar el espacio, sintiéndome cómoda de saber que para ella también le resultaba cómodo si estábamos juntas....