CAP. 34 Tobbias

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Atrapada en mi elemento, ¿Quién lo diría? Aún veo la casa de los Weasley, la famosa Madriguera, pero no logro salir de este elemento. Los susurros no paran y mi sensación de que ya casi atacarán la casa aumenta.

"Tu puedes Diana, aparece te ahí"

-Como si fuera tan fácil.-grito.

"Si es fácil."

Esa voz... la reconocería en cualquier lado.

-Abu...- siento como en mis ojos se acumulan lágrimas.

"Los elementos no son tus enemigos cachorrita, recuérdalo...tu puedes"

Yo puedo. Me concentro en la pradera. En mi saliendo de la tierra en esta. Y entonces ocurre. Vuelvo a sentir mi cuerpo, como este se despeja de la tierra. Abro mis ojos y entonces la veo, el letrero frente mío«La Madriguera» parecía gastado.

Acaricio el brazalete de mi abue con una pequeña sonrisa.

-Gracias Abu.

Camino, con una mano en la empuñadura de la espada, en dirección a la puerta. Toco y en lo que abren miro a mi alrededor.

"Ya casi atacan Diana." Miro en dirección a los árboles y asiento para girarme a la puerta dispuesta a tocar hasta que recuerdo que es medianoche y lo más seguro es que estén dormidos. Escucho un trueno a lo lejos.

-Hazle saber al equipo que los encontré, dales las coordenadas.

"Claro, ponte alerta"

Dos rayos más a lo lejos y entonces silencio. Miro al rededor y nada. Hago un hechizo protector a la casa y me pongo en posición sacando mi espada.

Escucho un chasquido detrás mío y me volteo cogiendo a quien sabe quién por el cuello levantando lo del suelo apretando con fuerza.

-Que carajos haces?!-veo esos ojos azules cielo que no sé porque pero extrañaba.

-Tobbias?

-Sí, bajame idiota.

Lo suelto mirándolo un poco sorprendida miro a mi alrededor y de nuevo a él.

-¿Qué haces aquí?

-Los señores Weasley me dejaron pasar la noche con ellos para mañana ir por mis hermanos.

Aprieto la empuñadura de la espada con más fuerza escuchar lo último. Suelto un suspiro saco mi sensor y empiezo a caminar al rededor de la casa en busca de algo.

-¿Y tu qué haces aquí?

-Oh! Nada, solo vine a dar un paseo nada más, ¿Tu que crees?

El sensor pita ligeramente. Suelto un bufido sacando mi estela jugando con ella.

-Hay demonios cerca?

Noto como intenta hacer que su voz no suene temblorosa y como "discretamente" se coloca detrás mío. Muestro una pequeña sonrisa pero sin mirarlo. Puede que se comporte como un chico un par de años más de los que en realidad tiene al igual que mis hermanos y yo y todo por culpa de Ortlan, pero a veces olvida comportarse así y me recordaba cuando la abuela estaba con nosotros, cuando el no era tan frío y cortante conmigo como lo es ahora.

-Sí, lo hay... será mejor que entres.

-Tú no me dirás qué haré.

Y volvió el chico que me odia.

-Bien, como quieras...luego no andes lloriqueando.

Bufa por debajo. Escucho como varias pesadas colas deslizándose por los árboles. Desvaino la espada y la balanceo por mis manos.

Diana Black-La hija de Sirius Black-Saga Harry PotterDonde viven las historias. Descúbrelo ahora