Reverend Insanity (Gu Daoist Master).Libro II "El demonio deja la montaña"

Capítulo 268

Riqueza repentina.

Shang Ya Zi se estaba preocupado.

Antes de irse, le dijo a Fang Yuan, que este asunto era importante y que necesitaba más tiempo para considerarlo.

El hecho de que se lo planteara significaba que el éxito estaba cerca.

Fang Yuan había visto a través de esta persona, sabía que este asunto estaba decidido. De hecho, incluso podría volver a subir los precios cuando llegara el momento.

Pero, ahora mismo, estaba indeciso, por lo que Fang Yuan no podía utilizar los precios para agitarlo.

Una vez que estuviera decidido, jeje, entonces los precios se dispararían de nuevo, sería simplemente demasiado fácil hacerlo.

Dos días después, Shang Ya Zi tenía una expresión demacrada cuando visitó de nuevo a Fang Yuan.

"¡Lo he decidido, vamos a cerrar el trato de acuerdo a lo que has pedido!" Apretó los dientes, después de mostrar una expresión de duda durante mucho tiempo, finalmente cedió.

"¡Confía en mí, definitivamente recordarás esta decisión! Ven, bebe". Fang Yuan sonrió ligeramente, sirviendo una copa de vino para Shang Ya Zi.

Shang Ya Zi levantó su copa y se bebió el vino de un solo trago.

"¡Qué clase de vino de mierda es éste!" Después de bebérselo, frunció el ceño y le gritó.

"Este es el vino de arroz más barato que encontré. Señor joven maestro, no tengo dinero para comprar un buen vino". Fang Yuan se rio ligeramente.

"Lo tendrás muy pronto. Puff..." Shang Ya Zi exhaló con fuerza.

Cuando aún lo pensaba, mientras se concentraba en tomar una decisión, pasó por un proceso doloroso. Pero ahora que se había decidido, ya se sentía muy relajado.

"Muy bien, he preparado el acuerdo, échale un vistazo". Fang Yuan le mostró una propuesta escrita.

Shang Ya Zi lo miró, y se quedó mirándola con rabia, sus ojos se abrieron de ira mientras golpeaba la mesa y gritaba: "¿Novecientas cincuenta mil? ¡Has vuelto a subir el precio! La última vez, dijiste ochocientas mil, pero sólo han pasado unos días y ya lo has subido en ciento cincuenta mil.... ¿Crees que estoy hecho de oro? ¡Sinvergüenza! ¡¿Crees que mis piedras primitivas caen del cielo?!"

Fang Yuan sonrió ligeramente mientras decía con calma: "Han pasado tres días, por supuesto que los precios aumentaron, tú mismo sabes cómo funcionan los bienes".

La frente de Shang Ya Zi estaba llena de venas, mientras saltaba de su asiento: "¿Crees que soy fácil de intimidar? ¡No tengo tanto dinero! Por esta pequeña herencia, ¿Quieres novecientas cincuenta mil? Eres como un león que abre su enorme boca".

"Cálmate, la ira dañará tu salud, señor joven maestro, este asunto no involucra sólo una pequeña herencia sino tu posición de joven maestro. Piensa en ello, cada año, un joven maestro es eliminado. ¿Cuánta gente anhela este puesto?" Fang Yuan dijo casualmente.

Una vez que escuchó sobre la posición de joven maestro, el furioso Shang Ya Zi perdió su rabia.

Fang Yuan miró su expresión, sabiendo que novecientas cincuenta mil piedras primitivas estaba por encima de su límite, cedió: "De acuerdo, de acuerdo, entonces qué tal novecientas mil piedras primitivas. Te lo concedo".

Shang Ya Zi se sentó lentamente.

Sólo llevaba un año en la posición de joven maestro, y tenía que lidiar con las evaluaciones, el número real de piedras primitivas que tenía en el bolsillo era sólo de unas cuatrocientas mil.