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La música en alto volúmen, acába de llegar al lugar acordado, por qué a diferencia de algunos de sus amigos, él tiene un trabajo, que limita su tiempo libre. La discoteca estaba repleta de gente eufórica, se acerco hasta una de las mesas, observando a su grupo de amigos tomar, estos lo saludaron con una mano, tomo su puesto en el sillón, comenzado una charla trivial hasta que entre muchas caras conocidas faltaba una.

—¿Dónde esta Mikey?

Tomo de la bebida ofrecida, de un golpe, para devolver el vaso, viendo los alrededores en busca de la mata de cabellos cenizos largos.

—Se fue a buscar a Baji, que desapareció con Chifuyu

—¡Ken-chin!— La contraria tomo asiento en el regazo del más alto, las miradas de todos fueron fugaces al momento, ya era algo normal para ellos ver a Mikey ocupar el espacio personal de Draken.—Te tardaste demasiado

—Culpa a shinichiro, me obligó a cerrar todo por qué quería salir con su novio— escucho la risa divertida de la contraria, paso su mano por su cintura hasta dejarla reposar en su caderá, ambos estaban tomando demasiada confianza en el contacto físicos, como si necesitarán saber que el contrario estaba ahí. —No bebas tanto Mikey, que no te llevaré a tú casa así.

—ken-chin aburrido— infló las mejillas, mientras recarga su cabeza en el pecho del contrario bebiendo de su cóctel ignorando lo que le dijo su vice comandante.

Es extraño ver a Draken corresponder el contacto físico, eso no paso desapercibido por los amigos cercano pero, lo tomaron como buen augurio, significa que sus líderes ya no estaban tan distantes como antes, cuando Ken era novio de la hermana de su líder.

(...)

Para Mitsuya ante sus ojos, había algo ahí, entre ellos, lo presiente pero, ambos son buenos actores escondiendo lo que sienten, ahora que están ebrios se dejan ver cómo son realmente.

Bailando pegado, mirándose a los ojos con sonrisas coquetas, susurrarle cosas al oído, la manera posesiva en la que Draken tenía puesta su mano en la cintura de Mikey, el como mata con la mirada a los idiotas que querían quitarle a la ceniza de sus brazos.
No culpa a sus amigos, ellos estaban ebrios, son tontos y ciegos como para notar que sus amigos desean comerse la boca entre ellos. No lo notan por qué son idiotas, tampoco ven que se están llendo de la pista a pasos rápidos con dirección a los baños, algo va a pasar pero, no irá a ver, no quiere traumatizarse.

••••

—ken-chin— gimió entre los labios del más alto, sentada en el lavamanos con su mejor amigo entre sus piernas, apretando sus muslos con deleite mientras la besa como si estuviera saboreando el más delicioso dulce que ha existido.
Se mezcla el dulce sabor de la piña colada con el ron y coca, saboreando la saliva del otro, desgustando la combinación. Tenía manos tomándolo de su nuca, para no poder separarse de él y el fuego que dansa sobre su vientre cada que sus lenguas se encuentran, peleando entre ellas.—ah— soltó un jadeo al sentir como rodea su pierna derecha colando una de sus mano bajo su falda negra de terciopelo, con la otra sostiene su cadera, sin dejar de besarla.—ken—El contrario se detuvo para admirarla.

Intoxicados lo suficiente como para dejarse dominarse por sus instintos pero, no tanto como para olvidar lo que estaba apunto de suceder entre ambos, en los baños de una discoteca.

Dejo los maltratados labio para besar su cuello, pasando su lengua, escuchando sus jadeos, quería clavar sus dientes, chupar la blanca piel hasta que queden sus marcas, demostrar que solo había alguien que podía satisfacer a Manjiro y ése, era él.

La palma de su mano se había colado bajo la ropa interior notando que nuevamente era de esas prendas que tiene encajé, quería verlas, saber de qué color era, sus dedos pasaron entre los pliegues encontrando un húmedo charco que lo hizo sonreír de gozo mientras besa el pecho de la fémina.

—Estas tan húmeda, que tengo ganas de lamerte— susurro sobre la oreja de la contraria, para después lamer y morder, sintiendo como se estremece, arañando levemente su hombro por la sensación.

—Ken— Su gemido ansioso motivo al contrario, dejando que el dedo medio juegue con clítoris de la contraria, su espalda siendo arañada mientras suelta lindos sonidos obscenos sobre su oreja, escuchando con claridad como llama su nombre.—¡Oh mierda!

Se detuvo sabiendo que estaba cerca de tener un orgasmo, por solo jugar con su lindo botón de carne, no se lo iba a permitir, se deslizó más, dejando que los dedos se empañen del líquido para lentamente meter uno sintiendo como se abre espació. La sensación de ser succionado por las paredes, solo lo hizo soltar un gruñido de gozo.

—No te muevas, si lo haces parare— amenazo al ver que en su desesperación se iba autopenetrar de un movimiento de cadera.—Quieta Manjiro

—Por favor, por favor— rogó con voz aguda.—Estaba tan cerca, Ken— escucho la risa maliciosa del contrario.—maldito sádico

Draken sonrío ante esas palabras, sus dedos estaban bien lubricados metió el segundo sintiendo que ahora sí se apretaba entre ellos, impidiendo algun movimiento, se adentro lentamente escuchando ese gemido largo, sonó lastimero pero, ella fue la desesperada.

—Son solo dos, imagina como se sentirá con mi pene — No sabía que estaba diciendo pero, no es como si la ceniza se opusiera, pudo sentir como era apretado, parece que la idea le gustó por esa contracción. Hizo movimiento circulares encargándose en chocar en esa parte superior dónde Mikey sentía placer vaginal, curvo sus dedos hacia arriba dejando que las yemas golpeen ahí. tembló del placer escuchando ese gemido alto sobre su oído, podía ir un poco más hondo sus dedos eran largo y podía golpear la vejiga de Manjiro, provocando otra descarga de placer, sus dedos siendo apresados con su otra mano tenía que sostener una de sus piernas, la ojionix solo se sostenía de él, de su polo, arañando, estrujando la tela entre sus dedos con fuerza.

Sentía el fuego de su vientre ser más fuerte, el hormigueo incesante y esa sensación de que algo quería salir de ella, solo hicieron que cerrará los ojos dejando que sus lágrimas de placer cayeran por su rostro.

—¡Ken!— Se recargo en el contrario, soltó un gemido bajo cuando los dedos salieron de ella, al día siguiente sentiría la irritación por el estiramiento de su entrada.—Sadico de mierda— balbuceo, puedo escuchar nuevamente esa risa petulante, deseaba golpearlo pero, nuevamente tuvo ese orgasmo de su vida que descompone su cuerpo, dejándola como peso muerto.

—Tú me provocastes— busco con la mirada el papel, tomo una buena cantidad de éste dejándola a un lado. Puso su mano en la espalda para sostenerla, con su mano libre comenzó a quitar la ropa interior—junta las piernas— le hablo suave al oído, escuchando ese tarareo de que ya lo hizo. Una vez lo saco observo el color de este, notando que era rosa pálido lo guardo en el bolsillo de su casaca, era su premio de hoy. Tomo el papel para limpiarla, lo haría con su boca pero, Manjiro no podía tener un segundo round con lo cansada que se ve.—listo, nos vamos a tu casa

—Esta bien

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Cuenta la leyenda que si me hablan al priv para pedir un fic, se lo hago, no importa el Shipp.

Este solo vale hasta el final del fic. Xd

APPETENCE •°Drakey°• Where stories live. Discover now