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Todavía sorprendida, señaló la caja que Ruan Tian le había pasado antes y preguntó: "¿Esto era de Huai Mo?".

Ruan Tian estaba confundido pero respondió obedientemente: "En, parece ser algo que su madre dejó para él".

Jiang Lili se sintió aturdida. Nunca había relacionado a Huai Mo con la Familia Huai. Aunque sabía que había un joven maestro desconocido de la Familia Huai, ¡nunca hubiera imaginado que fuera realmente Huai Mo!

Debe ser que su verdadero nombre no era Huai Mo en absoluto.

Jiang Lili no sabía cómo decírselo a Ruan Tian, este asunto era demasiado extraño.

Pero al mismo tiempo, el joyero que tenía en sus manos de repente parecía sentirse insondablemente pesado.

"TianTian, esto que te dio Huai Mo vale 80 millones de yuanes".

Ruan Tian.

Ruan Tian ni siquiera pensó antes de replicar: "Eso es imposible".

Jiang Lili realmente no sabía cómo darle la noticia a su amiga. Pero al mismo tiempo, se sintió ligeramente reivindicada. Como esperaba, su intuición no se había equivocado.

Desde la primera vez que Jiang Lili vio a Huai Mo, siempre sintió que había algo raro en él. Siempre se mostraba amable y fingía serlo, pero sus ojos no lo eran en absoluto.

Ella dijo: "Es cierto. ¿Has oído hablar de esa familia Huai en la capital?"

Ruan Tian negó con la cabeza: "Nunca he oído hablar de ellos".

Jiang Lili se rascó la cabeza y decidió hacer la comparación más directa que pudo: "Bueno, están al mismo nivel que la familia Qin o la familia Shen. Es decir, no sólo son ricos, sino que también tienen un fondo poderoso, prácticamente la realeza moderna".

Ruan Tian estaba incrédulo, y sintió que algo en su mente se derrumbaba.

Qué demonios, ¿no se suponía que Huai Mo era un joven pobre y lamentable como ella?

¿Cómo es posible que haya resultado ser un joven maestro rico?

E incluso después de encontrarse con él tantas veces, Ruan Tian nunca había visto un defecto...

Mientras Ruan Tian se sentía sorprendida, Jiang Lili comenzó a sospechar seriamente que todo debía haber sido orquestado intencionalmente por Huai Mo desde el principio. Después de todo, con su posición, no sería difícil mantener este tipo de secreto.

Casi quiso decir algo, pero después de mirar al confundido Ruan Tian, dudó y se tragó las palabras antes de que llegaran a sus labios.

***

En voz alta, Ruan Tian había dicho que no lo creía, pero después de escuchar a Jiang Lili analizar la situación por ella, realmente creyó la mayor parte en su corazón.

Y cuando llegó a la entrada del hotel, se encontró con una docena de guardaespaldas con trajes negros de pie frente al vestíbulo.

Mientras tanto, el propio Huai Mo estaba sentado en un sofá del interior. Cuando la vio, dejó el periódico que había estado leyendo y le sonrió como si nada fuera diferente de lo habitual antes de decir: "Has vuelto".

Al ver esto, Ruan Tian lo entendió todo.

Huai Mo tenía, en efecto, un origen inusual.

El cuerpo de Ruan Tian se sintió rígido y asintió torpemente: "Sí".

Luego le devolvió el joyero a Jiang Lili y se lo tendió: "Te devuelvo esto".

Huai Mo se levantó y a ella le pareció notar por primera vez que, aunque era joven, ya era una cabeza más alta que ella. Dijo: "Es algo que te he dado, así que no hay razón para que te lo devuelva".

Pero se trataba de 80 millones de yuanes...

Aunque le prestara cien a Ruan Tian...

¡Nunca se atrevería a tomarlo!

Ruan Tian empezó a sentirse un poco enfadada. Parecía que la habían engañado.

Como una tonta, había sido engañada.

Se preguntó si Huai Mo se había estado riendo de ella en su corazón y pensando que era una tonta cada vez que estaba con él y lo consideraba un estudiante arruinado.

"Lo pondré sobre la mesa".

Entonces Ruan Tian puso realmente la caja sobre la mesa y pareció terminar de hablar. Se dio la vuelta con la intención de dirigirse hacia arriba.

Inesperadamente, Huai Mo ni siquiera echó una mirada a la caja sobre la mesa antes de caminar detrás de ella con sus largas piernas.

Al mismo tiempo, se produjo una gran conmoción cuando la docena de guardaespaldas se apresuró a seguirla.

Los ojos de Huai Mo se volvieron fríos. Se dio la vuelta y dijo brevemente: "Largo".

Al escuchar todo esto, los pasos de Ruan Tian se detuvieron brevemente, pero luego entró despreocupadamente en el ascensor como si nada.

Sin embargo, antes de que las puertas pudieran cerrarse, un par de manos delgadas y pálidas las atraparon y, con un poco de fuerza, las empujaron bruscamente para abrirlas.

Huai Mo siguió poniendo su habitual cara de inocencia e ingenuidad. Preguntó: "TianTian, ¿estás enfadada conmigo?".

Ruan Tian respondió: "No".

Pero de alguna manera sonó como "Lárgate".

Pero Huai Mo siguió actuando como siempre, sin entender o fingiendo que no lo hacía. Inclinó la cabeza y sonrió: "No quería mentirte".

Sus hermosos ojos eran y expresivos, y cuando se humedecían un poco así la mayoría de la gente no podía soportar regañarle o incluso levantar la voz.

Continuó: "Nunca me preguntaste".

Ruan Tian: ¡¡Así que sigue siendo mi culpa!!?

[1] Rechazar el amor del Ex marido Donde viven las historias. Descúbrelo ahora