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Naruto ahora volvía a su hogar, aún vistiendo como varón. Tocó la puerta de su casa y su madre le abrió y se alegró de verlo, la abuela vino por los gritos y entre ambas le regañaron por haber salido de casa.

-Y mi padre?-

-Está en el patio querido. Desde que te fuiste no se ha movido de allí- Naruto se disculpó y fue a llevar la espada y el colgante a su padre. Se arrodilló frente a él y le ofreció la espada y el colgante como objetos de honor para su familia. Minato dejó las cosas de lado y abrazó a su hijo.

-Solo me importa que hayas regresado con bien-

Mientras tanto con las mujeres en la distancia...
-Una espada! Trajo a la casa una espada! Un hombre es lo que debería traer!- se quejó Tsunade

-Mamá- así le decía Kushina de cariño a pesar de ser su suegra -Qué? Qué tanto miras a la puerta?-

-No sé. Pensé que si decía eso un hombre grande y varonil iba a cruzar preguntando por Naruto-

-De cierta forma yo también pensé lo mismo- admitió Kushina entre una mueca tipo sonrisa

Con todos los asuntos arreglados, Naruto contó sus aventuras durante el ejército, excluyendo OBVIAMENTE a su querido capitán. Naruto también estaba enamorado de Sasuke pero al inicio se había negado a aceptarlo porque estaban en una guerra y el amor no cabe entre la guerra. Ahora que todo estaba tranquilo, supo que los sentimientos que sentía eran reales pero se le confesó! Estando enfrente de todos! Mientras todavía pensaba que era varón! Tal vez si le hubiera confesado en secreto lo hubiera aceptado y le mostraría su secreto, pero lo hizo frente a miles de personas. Cómo iba a decirle su secreto si había gente mirándolos? Definitivamente era un loco por confesarse en tal situación pero también valiente de su parte.

Todos estaban fascinados con las anécdotas del más joven.

-Te vestiste como doncel y nadie se dió cuenta?!- preguntó de nuevo Tsunade

-Sí-

-No puedo creerlo! Definitivamente son unos idiotas!-

-Mamá, no digas esas cosas en voz alta- quiso relajar Minato a su madre

-De dónde sacaste el apodo de Menma?- preguntó Kushina muy interesada en el tema

-Ya lo había pensado desde antes-

-Y cómo te acoplaste tan rápido?-

-Bueno. En realidad, les mentí...- Naruto le contó a sus padres y a su abuela acerca de los entrenamientos que tenía desde pequeño. Cómo las historias de guerra le fascinan y lo motivaron a aprender a usar la espada

-Eso explica el porque repuebas el examen cada año-

-No! Sí hice mi esfuerzo por aprobar pero siempre algo salía mal- también les contó acerca de los pruebas que había tenido y como los arruinaba por sus tropezas. Todos tuvieron su felicidad en familia y Naruto se alivió de haberles contado acerca de su vida a sus padres pero el secreto de Sasuke quedaría para siempre con él.

Los siguientes días, semanas, y meses le llegaron miles de propuestas a Menma Namizake, como el héroe de China. Por obvias razones todos fueron rechazados, solo personas por querer fama querían casarse con el hijo varón de los Namizakes. Naruto se dedicó a tiempo completo a su aprendizaje de ser doncel, aveces se escapaba y entrenaba con la espada pero Kurama lo reprendía y Naruto volvía a su puesto.

En cuanto a Kurama...
-Solo te ordene que lo trajeras de regreso pero veo que hiciste algo mejor- felicitó el antepasado mayor a Kurama

-Tsk, no fue nada-

-Tienes mi permiso si deseas quedarte con Naruto-

-Am...-

Kurama terminó al lado de Naruto, seguía siendo su guardián pero solo se dedicaba a reprenderlo, a burlarse y a bromear con él. Tal vez sean cosas ofensivas para algunos, para este dúo era de lo más normal. Aunque Menma escondió a Kurama de sus padres, o le sacarían provecho de él.

En cuanto de su amor por el capitán...

Eso queda atrás.

Menma ya no existe y solo queda Naruto, el torpe doncel.

Mulan/NarutoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora