CAPÍTULO 28

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Hermione y yo seguíamos tumbadas en la cama besándonos, sin pasar a mayores ya que acabábamos de hacerlo y estábamos cansadas. Ahora estábamos en nuestro mundo, sin peligros, sin mortífagos y sin nada de qué preocuparse, tan solo las dos.

En realidad, estar así con Hermione era lo único que podíamos hacer antes de que Delphini despertara, así que había que aprovechar ahora ya que no sabía cuándo íbamos a volver a estar así. Entonces, llamaron a la puerta y gruñí cuando escuché la voz de Harry al otro lado.

̶ ¿Qué quieres Harry? ̶ pregunté alto para que nos escuchara.

̶ Delphini ha despertado ̶ contestó el azabache y me incorporé rápidamente ̶ tenéis que volver a la enfermería.

̶ Ahora vamos Harry ̶ aseguró Hermione y se levantó de la cama.

Escuchamos un "vale" por parte del azabache y escuchamos pasos alejándose. Me levanté también y seguí al baño a mi esposa hasta el baño dónde se estaba dando una ducha rápida. Me metí con ella para ahorrar tiempo y acabamos rápido.

Salimos del baño y nos cambiamos otra vez con la misma ropa que llevábamos antes de que pasara todo. Cuando estuvimos listas, fuimos con paso rápido a la enfermería, allí, estaban varios aurores junto a los chicos y Delphini en la camilla apresada de manos y pies por esposas.

̶ Vas a decirnos dónde has mandado el libro ̶ exigí seriamente.

̶ ¿Por qué haría eso... prima? ̶ preguntó riendo y traté de no perder la cabeza.

Sentí una mano sobre la mía y obviamente la reconocí enseguida. Miré a Hermione a mi lado y me susurraba con los labios que me calmara. Asentí y suspiré tratando de liberar la tensión y el enfado de mi interior.

̶ Te lo voy a pedir otra vez, dónde está el libro ̶ repetí mirándola.

̶ Si te lo digo ya no tiene gracia ̶ comentó y fruncí el ceño ̶ pronto me sacarán de aquí y mi padre podrá volver a reclamar el sitio que le corresponde.

̶ Permíteme que te corrija ahí ̶ intervino Harry ̶ no vas a salir de aquí a menos que sea para ir a Azkaban, dónde deberías estar.

̶ No lo creo Potter ̶ negó la chica sonriendo cínicamente ̶ no vais a mandarme a ningún lugar porque podría escaparme.

̶ Te doy una última oportunidad, dónde está el libro ̶ dije cruzándome de brazos.

̶ En un lugar con muy buena compañía ̶ contestó ̶ tu padre debe de estar cuidándolo muy bien de hecho, mucho mejor de lo que te ha cuidado a ti en toda tu vida.

̶ Traed el veritaserum ̶ les pedí a los aurores y asintieron saliendo de la enfermería.

̶ Puedo aguantar el veritaserum, me han entrenado bien ̶ comentó la pelinegra.

̶ No me importa ̶ dije sonriendo de igual forma que ella ̶ a todos nos afecta la poción de una forma u otra, solo hay que aceptar con la cantidad necesaria.

Delphini apretó la mandíbula mirándome y sonreí victoriosa. Miré a Hermione y me miraba con una pequeña sonrisa y asintió con la cabeza en aprobación. Los aurores volvieron con la poción y con ayuda de Harry y Ron se la di a Delphini.

Esperamos un poco y le preguntamos alguna cosa, pero no decía la verdad. Le dimos más de la poción y así seguimos durante bastante rato. Al final, acabamos prácticamente todo el bote, pero empezó a decir la verdad.

̶ Dónde está el libro ̶ le pregunté y luchó contra la poción ̶ no te resistas, no es bueno. Puedes hacerte daño si te resistes... prima.

̶ El libro está en la antigua casa de la familia Gaunt ̶ acabó diciendo ̶ lo tiene Lucius.

No me importa la sangre (2ª parte)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora