EMPERADOR SUPREMO DIVORCIADO

PROLOGO

El imperio Central de Star Stream Continental era famoso por el gran poderío que había acumulado a lo largo de los años, y ese poder se había obtenido gracias a que generación tras generación todos los emperadores y emperatrices habían sido grandes guerreros, diplomáticos y profetas.

Y sin embargo hasta el día de hoy ningún profeta había sido tan grande como lo era Anna Croft, quien se decía era la más intuitiva y calculadora profeta de todo el continente, sino incluso de todo el territorio conocido por la humanidad.

Y aunque muchos decían que el éxito del Imperio Central era sin duda mérito suyo, lo cierto es que el hombre con el que estaba casada tampoco desmerecía un sin número de méritos propios.

Comprometidos desde una edad temprana la ominosa profeta Anna Croft y el heredero mayor de la casa que rompe el cielo Yoo Jonghyuk, eran sin duda el matrimonio que llevaría al imperio Central a sus tiempos de mayor esplendor, y aunque el suyo era un matrimonio por conveniencia lo cierto es que el tiempo, la convivencia y los juegos compartidos desde niños los habían hecho compañeros inseparables y, tal vez, el mejor equipo en el que una persona podría pensar.

Hasta ese día...

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-Acepto este divorcio.

En la iglesia se había hecho el silencio total mientras todas las miradas recaían sobre las cuatro figuras que estaban en el atrio principal.

La primera figura era la sacerdotisa que observaba a las personas frente a ella con una incredulidad oculta detrás de rasgos profesionales.

Las siguientes dos figuras eran la emperatriz y su amante, quienes se abrazaban el uno al otro; él con una "angustia" plagada de hipocresía y ella con esa sonrisa triunfante con la que solía celebrar cuando conseguía estafar a otros imperios.

La cuarta y última figura (y la que había pronunciado las líneas responsables de silenciar a todos) era un hombre alto de hombros anchos y porte majestuoso, vestido de negro de pies a cabeza y cuyo rostro era la definición de cualquier estándar de belleza que pudiera haber en el imperio.

Sus brazos estaban cruzados, sus pies no se tocaban entre ellos, su espada estaba firmemente sujeta en su cadera y no portaba ninguna clase de armadura debajo del largo abrigo oscuro que rozaba el piso; a pesar de eso, ese sujeto emanaba tal aura imponente que cualquiera lo pensaría dos veces antes de siquiera levantar la vista en su dirección sin previo consentimiento.

Y sin embargo...

-¿Cómo puede ser esto? – se preguntaban algunas de las damas de la última fila entre murmullos.

-¿Acepta el divorcio? – susurraban los caballeros de la guardia sin terminar de creer lo que escuchaban.

-¿Lo acepta así sin más? – Sollozaba una adolescente de cabello largo con los puños apretados y los ojos nublándose en lágrimas – pero el maestro nunca antes ha...

-Emperador Yoo Jonghyuk – habló la sacerdotisa callando con su voz los murmullos que habían estallado en el templo – ¿en verdad acepta este divorcio sin ninguna objeción?

-Sí – respondió el hombre con el mismo gesto estoico de antes.

A pocos metros de él, el amante de la emperatriz la refugiaba entre sus brazos para así poder ocultar su sonrisa triunfante entre los rubios cabellos de ella, y por su parte la emperatriz no se molestaba siquiera en disimular la satisfacción que estaba sintiendo.

En su mente, esa mujer preparaba ya la siguiente parte de su plan...

-Y también exijo la autorización para volver a casarme.

-¿Eh?

-¿Cómo?

-¿QUÉ?

Los guardias de antes dejaron caer sus armas, las mujeres en las últimas filas de los bancos de la iglesia se pusieron de pie sobresaltadas e inclusive las sonrisas de la emperatriz y su amante se borraron por completo dando paso a expresiones llenas de sorpresa y estupor.

En medio de todo el caos, sólo la sacerdotisa conservaba la compostura mientras sus ojos profundos se fijaban en el hombre vestido de negro y, sólo después de lo que parecieron horas, es que volvió a hablar.

-Tal pedido extraordinario... Debo preguntar majestad ¿con quién es con quien desea casarse?

No fue Yoo Jonghyuk quien respondió al pedido de la sacerdotisa, sino que más bien la respuesta llegó a través de pasos sonoros y rítmicos que poco a poco se acercaban, de un abrigo blanco que arrastraba por el suelo con el ondear elegante de una capa y de un hombre de cabello oscuro que sonriendo de una forma francamente descarada llegó hasta el sitio ocupado por Yoo Jonghyuk y sujetó la mano del ex emperador como si sujetar la mano de un hombre recién divorciado frente a su ex y su reino fuera lo más común del mundo.

Nada más los ojos de ese hombre vestido de blanco se encontraron con los ojos del hombre vestido de negro, la expresión de este último se relajó de una forma que nadie que lo conociera podía creer si no lo estuviera viendo con sus propios ojos.

-Voy a casarme con él – anunció finalmente el ex emperador Yoo Jonghyuk sin ningún reparo.

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Bien, esta historia en realidad no es sólo un proyecto mío sino que @solopiensalocurasy yo lo vamos escribiendo y revisando literalmente codo a codo (en realidad  le sugerí que también lo publicara ella, pero ella dijo que sólo lo hiciera yo).

Y sí, estamos haciendo un universo de "La Emperatriz Divorciada" con los personajes de orv... ni yo misma estoy segura de qué decir al respecto pero espero que la disfruten.