Línea Azul

• Prefacio •

Éramos como dos fantasmas sentados en el lugar donde morimos, sin reconocernos, aunque pudimos haber pasado toda una vida juntos.

~Escuela para trastornos y enfermedades.

Advertencias:
Humor negro, bullying, violencia doméstica, autolesión.

Hola, Hola, Hola, ¡soy MMIvens pero me dicen Mei! ¿Cómo llegaste aquí? Yo siempre estoy aquí, desde hace... varios años, por desgracia.

¿Te gusta el chile?

He venido con otro proyecto, polémico como de costumbre, desarrollado en el universo de "Escuela para trastornos y enfermedades" (EPTYE), AH.

Estoy muy emocionada de seguir trabajando con esta temática, y para quienes no estén al tanto, este es un mundo donde los personajes encarnan malestares. No es necesaria la lectura de otras obras pues son historias distintas, solo sirve como referencia de ciertos sistemas en el mundo.

Línea Azul es una sátira de realismo mágico que pretende hacer énfasis en ciertos comportamientos autodestructivos y criticar la violencia en todas sus formas; todo esto, mostrado desde la mira de "enfermos". Padezco ciertos problemas crónicos, razón por la que estoy muy ligada al tema de la salud mental y física, también por ello, aunque busque incomodar, mi intención no es ofender aunque sé que no hacerlo es imposible.

Esta historia será escrita con modismos y jergas mexicanas; cualquier duda pueden preguntar en comentarios. Y aclaro que encontrarán humor en la escritura, que pueden parecer dedazos como "HolA" pero es completamente intencional.

Mi deseo con esta historia, aún con lo ofensiva que puede ser, es mostrar cómo un trastorno/enfermedad/síndrome puede dominar cada sentimiento de nuestro día a día. La discriminación y división entre enfermos y sanos, el prejuicio entre personas que padecen las mismas condiciones, y el autodesprecio que uno puede generar.

No somos iguales, no lo controlamos de las mismas formas. Se nos pide que seamos responsables de algo que no decidimos, y aunque queramos huir, somos dueños de lo que nos atormenta.

Pero la sensibilidad con la que aún buscamos controlar nuestras enfermedades, exige una profunda simpatía por el deseo de estar bien. Solo hay dos cosas por hacer con lo que padecemos: arrojar o sostener, pero nunca darles el control que creen merecer.

Ojalá y tus sentimientos puedan ser abrazados con esa misma simpleza y un gran chiste de valor.

¡Gracias por unirte a la lectura!

~MMIvens.