AMOR ESCRITO CON SANGRE (PRIMER LIBRO DE LA SAGA AES)

66. ¿Quieres que este sea el final?

Alaia

— ¡LO LOGRAMOS! — Exclamó Mike emocionado.

Choqué los puños con él y luego intenté hacerlo con mi hermano, pero este se veía perdido en sus pensamientos.

— ¿Dónde está papá? — me preguntó mi hermano.

Extrañamente, no lo he visto ¿Dónde estará? Debe estar haciendo algo para conseguirnos un lugar seguro para irnos en unas horas.

Bradly, Philips y los infiltrados deben estar por llegar, Phillips me avisó que harían algo más que era parte del plan y que luego me contaría.

— Voy a mi habitación a buscar algunas cosas para darte antes que te marches— Mike agarro mi rostro y beso mi frente— No quiero dejarte ir, pero sé que estarán mejor en otro sitio, mejor busco eso ahora, porque luego lloro — reconoció Mike con los ojos cristalizados.

Jalé sus cachetes y negué, no quería verlo triste, ahora teníamos que celebrar porque algo bueno había ocurrido.

— Esto no es un adiós, nos veremos de nuevo, créeme que no te libras de mí— le asegure.

Mike asintió y me volvió a dar un beso antes de usar sus poderes para ir a buscar lo que decía que necesitaba.

— ¿Tú qué tienes? — pregunté acercándome a mi hermano.

Daimon, me abrazo de repente y comenzó a llorar, realmente quedé sorprendida cuando lo escuché sollozando, mi hermano pocas veces se ha mostrado así conmigo.

— ¿Qué paso? ¿Vincent te hizo algo? Vamos dímelo y yo...— me interrumpió.

— Yo soy el problema, yo provoqué esto— aseguró desesperado— ¿Por qué siempre lastimo a los que quiero? — cuestionó molesto.

Trate de llevarlo a la cama para hablar con más comodidad, pero él no se separaba de mí, lo cual hizo difícil el proceso.

— ¿Qué provocaste? — pregunté.

Daimon se separó de mí y comenzó a rascar con fuerza sus brazos, me apresuro a agarrar sus manos para evitar que se lesionara.

— Vincent me odia y....— las lágrimas aumentaron y no termino decir sus palabras.

Lo abracé tratando de transmitirle que no estaba solo, quería decirle que ahora tenía a ese bebé en su barriga y que le hacía mal todas estas emociones, pero no sé qué reacción tendrá cuando se entere de ello.

La puerta nos interrumpió por un momento, lo cual hizo que Daimon se apresurara a alejarse de mí para limpiar sus ojos y fingir que nada le pasaba. Siempre es así, no quiere verse débil ante los demás.

— Voy a abrir, tal vez es papá— sugerí.

Me acerqué a la puerta y la abrí, no tuve tiempo para pensar o actuar, entraron viajeros del tiempo que de inmediato reconocí por su ropa y brazalete y nos lanzaron dados tranquilizantes para dormirnos.

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Mike

Fui a mi habitación y para mi sorpresa ahí estaba Noah, me asusté y miré a todos lados pensando que me había delatado y había venido con todos los guardias para detenerme.

— Estoy solo—me aviso.

Suspiré por alivio, estaba cansado para pelear.

— ¿Qué haces aquí? — pregunté.

Pensé que decirle que era Omega lo iba a alejar de mí y así sería más fácil olvidarme de lo que siento por él, pero está aquí y eso no era parte de mi plan.