17. Cordón umbilical.

2K 197 887
                                    

Hi~ Subo este capítulo muy tarde, a 15 minutos de que se termine el plazo por hoy porque~ era obvio, hoy quede noqueadisima por tanto cansancio acumulado, de hecho, reviví porque hubo un temblor bien fuerte (cosas de paises sísmicos) a veces se me olvida que tengo limitaciones físicas uwu pero aún así, estaba realmente emocionada por el capítuño de hoy así que espero que les guste y más encima la tematica justo coincidio con el día de hoy (el día de la piña, es decir, shorter). Recuerden las advertencias que les he dado con anticipación. Mil gracias a quienes se toman el cariño para leer.

¡Espero que les guste!

Eiji grita a todo pulmón

Oops! Această imagine nu respectă Ghidul de Conținut. Pentru a continua publicarea, te rugăm să înlături imaginea sau să încarci o altă imagine.

Eiji grita a todo pulmón. Un dolor lo atraviesa entero. No puede relajarse. No puede enfocarse en la tierna mano de Ash sosteniéndolo como si fuese un ancla. Duele. Duele más de lo que jamás imaginó que podría dolerle. Los doctores gritan algo. Sacan un bulto ensangrentado. Lo envuelven dentro de una toalla. Llora. Llora energéticamente porque probablemente tiene frío y Eiji tiene muchos deseos de poderlo cargar contra su pecho. La cara del doctor es preocupante. Le explica cosas a Ash. Eiji no logra entenderlas. Eiji no escucha más que el electrocardiograma.

Latido... Latido... Latido.

Latido... Latido... Latido.

Latido... Latido... Nada.

La sonda con el ritmo cardíaco cae de golpe.

Es débil.

Eiji se remece angustiado en su camilla. Los médicos se le abalanzan encima. Gritan cosas. Necesitan abrir más profundo. Algo ha salido mal. Uno de los bebés se ha atorado con el cordón umbilical. Esta es la razón de la cesárea. Ni siquiera se alcanzó a dilatar. El doctor está sudando. Su esposo toma su mano con una fragilidad tan dolorosa que ahora siente la necesidad de consolarlo aun si la operación es una agonía para Eiji. Se ha complicado el procedimiento. Su bebé no sale. No comprende por qué.

Latido... Latido... Nada.

Latido... Latido... Nada.

Latido... Nada... Nada.

Toma la palma de Ash con fuerza, siente que sus ojos están empapados de llanto pero todo luce aun irreal. Le recuerda a cuando lo pusieron en esa habitación con...¡Shorter, soy yo! ¿No lo ves? Pero él nunca podría olvidar el vacío en los ojos de su amigo. No había calidez. No había ternura. No pendían sus estoy-tan-cómodo-contigo. Solo horror. Un horror paralizante enfocado a Eiji. No pudo elevar la cuchilla. Ash le gritó muchas cosas. Cadenas retumbando. Sonaban metálicas. Lo apuñalaron. Goteó sangre hacia el girón que quedó hecho su camisa. La camiseta que Dino Golzine le regaló, se la colocó justo después de que intentara abusarlo. Si lo hubiese abusado, ¿estaría dando a luz bebés producto de una violación? Se pregunta si también estaría angustiado en esta situación o preferiría perderlos.

Latido... Nada... Nada.

Latido... Nada... Nada.

Nada... Nada... Nada.

All too well [Agosto de MPreg]Unde poveștirile trăiesc. Descoperă acum