La nueva Generación [PJO, HoO]

Capítulo II

-¿Qué te parece Quirón?- preguntó Annabeth.

-Creo que quería deshacerse de nosotras cuanto antes.

-Eso es porque últimamente está todo muy tranquilo y Quirón tiene que poner en funcionamiento de nuevo todas las defensas del campamento. Ven te voy a enseñar las cabañas.- caminaron unos minutos.- Y aquí estamos, cada cabaña es para un dios diferente, las dos más grande de allí son de Zeus y de Hera. Normalmente están vacías ya que Hera no tiene hijos semidioses y Zeus hizo una promesa después de la segunda guerra mundial, aunque, al final la rompió igualmente.

-¿Y tú en cual duermes?

-En la de Atenea, ella es mi madre divina.

- Ah, mi padre siempre me dijo que Atenea es mi madre pero, Quirón quiere que me reconozca.

-Eso deberías de habérselo dicho, habrá pensado que no lo sabías y espera que alguna diosa te reclame como hija suya.

-Bueno puedo decírselo luego. ¿Puedes enseñarme la cabaña?

-Vale, ven conmigo.

Entraron en la cabaña que tenía una lechuza tallada encima de la puerta. La cabaña era gris y tenía unas cortinas blancas. Dentro había unas literas encajadas contra una pared, una biblioteca, varios escritorios, un montón de objetos para diseñar y trabajar, mapas...

-Wow- dijo Elia- es alucinante.

-Me alegro de que te guste. -Le respondió Annabeth sonriendo.

Salieron para seguir viendo el campamento, en ese momento un chico se acercó, tenía el pelo negro despeinado y los ojos del mismo color que el mar. Se acercó a Annabeth y le dio un beso.

-¿Quién es tu amiga?- Le preguntó el chico a Annabeth.

-Percy esta es Elia, es también hija de Atenea.

-¿Sois novios?-preguntó Elia.

-Vaya que perspicaz es tu hermana, ¿no? ¿Qué edad tienes?

-7 años.

-Pareces más...

-¿Madura?- inquirió Annabeth.

-Sí, te pareces a mí hermana pequeña.

-Le estoy enseñando el campamento a Elia que acaba de llegar.- dijo Annabeth.

-¿Aquí no hay nadie de mi edad?- preguntó Elia.

-Emh, Harley está permanentemente aquí, él ha cumplido este año 8 años, debe de andar por aquí jugando con su lanzallamas o construyendo algún explosivo.

-¿Se puede hacer eso?-Preguntó alucinada Elia.

-Harley es un hijo de Hefesto, él es quien crea esas cosas.

-Que guay. ¿Y dónde está?

-No lo sé vamos a buscarle. ¿Percy, nos ayudas?

-Claro.

En ese mismo instante una llamarada de fuego subió desde la playa.

-Sí Percy no estuviese aquí, diría que ha sido él- Dijo Annabeth. -Así que es Harley jugando con su lanzallamas.

-Creo que ese chico me cae bien.- Comentó Elia como quien comenta el tiempo.

-Elia, no le conoces y solo has visto como lanza una llamarada de cincuenta metros ¿Y ya te cae bien?- preguntó Percy – y yo que pensé que tenía problemas con las explosiones.

-Y lo tienes Percy, haces explotar a casi todos los monstruos con los que te cruzas. – Le respondió Annabeth. -Vayamos a la playa.

Al llegar allí se encontraron a una chica morena de la edad de Percy y Annabeth echándole la bronca a un niño con el mismo pelo moreno y rizado, con una sonrisa traviesa en la cara y un lanzallamas decorado con pegatinas de caritas.