Capítulo 16.

2.8K 197 3
                                    

– ¿Estás segura de eso?

Me miró firme y con una de sus manos en mis piernas.

– Estoy demasiado segura.

– Nunca entenderías el por qué te amo tanto, Sainz.

La mano que tenía en mi pierna, la movió rápidamente y me jalo del rostro para besar mis labios. Se sentía tan bien poder arriesgarme de esta manera por un amor que definitivamente, movería mar, cielo y tierra.
Después de eso, volvió a conducir, iríamos a casa para poder cenar y dormir juntos, pasar tiempo que era totalmente hermoso para mí. Mañana sería un día difícil.

...

Desperté sola en la cama, con una nota a mi lado que decía "Te veo en el juego. Te amo."
Su olor aún seguía ahí.. era tan mágico lo que me hacía sentir con detalles tan pequeños.
Vi el reloj y me espanté, ¡en media hora minutos comenzaría el juego! Yo tenía que estar ya arreglada y desayunada para poder ver a mi hermoso novio y sus Bengalíes.
Tenía una sorpresa para él, y era que Sarah desde hace unos días me había conseguido una chaqueta con él número de Joe, y en lugar de llevar su apellido tenía por nombre un "Is My Boyfriend."
Sarah tenía una vieja amiga, la cual le ayudaba con el vestuario, Kristen, la esposa de Kyle Juszcyck, era una profesional en el ámbito de la moda. Todo lo hacía bien.

Me vestí en seguida y me fui al estadio, ahí comería algo simple y delicioso. Ahora lo único que quería era no perderme jugar a mi novio.

Llegué al estadio justo 10 minutos antes del juego, todos ya estaban listos y ya los presentarían por equipo, cómo era juego en casa, las porristas y animadores estaban en puerta para recibirles. La mascota salió primero corriendo con una bandera de la B en las manos.

Yo grité de emoción cuando le ví salir al 9, tan perfecto y seguramente el mejor jugador de la liga, o al menos para mí.

– Te tienen loca, ¿verdad?

Dijo Gracie, la esposa de Evan.

– Demasiado.. no me creería estar así de un mariscal de campo.

– Pues lo estás, linda. Así que empieza a creer.

Sarah, Gracie y yo éramos grandes amigas. Eran con quiénes me llevaba mejor, incluso ellas ya tenían planes.. Sí me casaba con Joe, ellas serían mis damas de honor junto a mis demás amigas, Gracie y Sarah serían las preferidas. Según ellas ya tenían todo calculado.

El primer cuarto se había ido en gritos y abucheos a la defensa de Panthers, la afición estaba molesta por cómo trataban a Joe, e incluso yo. A pesar de sólo llevaba una captura.

Final del partido.
23-10.
Favor a Bengals.
Colocándose a 5-4.

Todas las chicas en el palco estábamos más que felices, nuestros chicos se habían llevado la victoria en la bolsa e incluso con un touchdown de mi novio, ese 9 había corrido para anotar el touchdown finalizador. Al anotar, si celebración había sido con una "A" y un corazón al aire. Dedicado a mí.
Estaba tan orgullosa de él, no podía dejar de pensar en lo feliz que se sentiría.

Cuando nos reencontramos con nuestros chicos, fuimos a casa para poder descansar. Todos estaban cansados después del juego de hoy y lo único que querían era dormir o simplemente ver tv en cama.
Joe y yo fuimos a mí casa, para ver películas y después cenar e dormir un rato.

– Ese touchdown fue para ti.

Fue él, quién rompió el silencio.

– ¿Sí?

– Sí, todos mis touchdowns serán para ti, de ahora en adelante.

– Me agrada esa idea.

Me recosté sobre su pecho.

– Me encanta estar contigo.. me genera esa paz inmensa.

Mi corazón se derritió, Pierre nunca me decía cosas así. Con él ni siquiera una noche tranquila podía tener.
Y en cambio.. con Joe era todo tan perfecto.

– A mi también me encanta estar contigo, siento que fuimos hechos para estar juntos.

Me levanté un poco para poder mirarlo, él ya tenía su mirada en mi y una mano en mi cabeza para acariciar mi cabello.

– ¿Tú crees?

– Lo creo.

No me aguanté más las ganas, y besé sus finos y delicados labios. Era tan suave besarlo, cómo un algodón.
Nuestras manos fueron bajando y jugando, él las metió debajo de mi pijama para acariciar mi cintura. Sabía lo que pretendía, pero. ¿Estaba lista?
Me dejé llevar por él momento y simplemente disfruté de lo que tenía la noche preparado para mí y Joe...

...

La noche anterior había sido mágica.. ¿cómo explicarlo? Joe y yo habíamos hecho el amor, no hablo de tener sexo loco o cosas así, simplemente habíamos tenido una noche hermosa y de solamente amor. Él era tan bueno en la cama y también animándome, después de eso, cada que despertaba preguntaba si no me sentía mal, o si me dolía después de haberlo hecho. Yo negué todo por qué la verdad me sentía mejor que nunca, estar entre sus brazos, desnudos los dos y conectar de esa manera era mi favorito ahora.

Cuando desperté, me moví un poco sin romper el abrazo de Joe, gire y lo ví dormido. Era tan perfecto..
Me quedé unos segundos así, para acariciar su mejilla, todo su rostro en sí.
También sus brazos suaves que me rodeaban para abrazarme y no dejarme ir. Me gustaba, y mucho.

El amor es dorado y no rojo.. tú me lo estás enseñando.

Susurré, con cuidado de no despertarlo, ya que seguramente aún estaba cansado del juego y de la noche, claro.
Me levanté de la cama con cuidado de no despertarlo, enredada en una sábana me dedique a buscar mi pijama por el suelo, pero no había nada, así que tome la camisa de Joe en su lugar, tenía dibujitos de Bob Esponja, su caricatura favorita.

Mi teléfono vibraba tanto que realmente me desespero por la forma en que sonaba, era un mensaje de Pierre, algo raro que a los segundos desapareció y cambio por un "Se anulo el envío de este mensaje"

"– Te extraño tanto, ¿podemos intentarlo otra vez?"

𝗔𝗳𝘁𝗲𝗿𝗴𝗹𝗼𝘄 |  𝑱𝒐𝒆 𝑩𝒖𝒓𝒓𝒐𝒘.Where stories live. Discover now