DEMANGEL© (libro #1 Finalizado)

CAPÍTULO 18: "LOS ORCOS ATACAN IFÁS".

Los caballeros de Soin llegan a la entrada del reino de Maipas a través del portal. Tres hechiceros los esperaban del otro lado para llevarlos hasta la torre.

—Bienvenidos caballeros, el Hirofante les espera.— proclamó uno de ellos.

De esta manera parte a la torre de Aves, al llegar a la torre, uno de los Hechiceros que allí estaba los guia a una de las islas flotantes.

Al llegar, el Hirofante los esperaba con Grifos, Quimeras y Dragones; que les servirían como transporte para el reino de Ifás, De esta manera parten inmediatamente a su destino.

Situada al oeste de Ifás, la aldea de Ravaca; en ella encontramos a un grupo de aventureros; cuatro chicos y tras chicas que se enfrascan en una aventura de expedición en el bosque.

Cuando de repente ven a una criatura correr entre los arbustos y deciden perseguirla, la persecución los lleva hasta una cueva.

—En donde se metió. — dijo uno de ellos, llamado Asían; un Joven alto, de cabello cenizo, ojos verdes. Es un espadachín muy talentoso en su tierra natal.

—Seguramente entró en la cueva. — le respondió otro de sus compañeros; llamado Sebastián, un joven Elfo oscuro, tenía ojos rojizos, piel oscura, cabello blanco. Era un excelente arquero.

—Pienso que seria bueno ir a revisar. — comentó una de sus compañeras la cual era una sacerdotisa. Ella era rubia, cabello ondulado y muy largo, ojos color miel y tenía piel clara. Todos se pusieron de acuerdo y se adentraron en ella.

En Ifás nuestros héroes parecen estar conmocionados por el robo del arma mística de ese reino, le dicen al rey que no es la primera vez que algo así sucede, que ya ha pasado antes en los otros reinos.

—¿A qué se refieren? — indagó Romel.

Ewyine procede a contarle a detalle. —Vera su alteza, esto empezó hace un tiempo atrás. —

—Precisamente en el reino de Abell, un grupo de elfos oscuros se infiltro en el castillo del rey Baruc. — enunció.

—Tomaron de allí, el arma mística que estaba en su posesión. — prosiguió.

—Se la llevaron, el rey Baruc se puso en contacto con nuestro reino. — añadió.

—Y varios de nosotros fuimos a recuperar dicha arma, en el territorio enemigo. — finalizó.

—Entonces los elfos oscuros ¿Están de tras de esto? — cuestionó el rey Romel.

—No. Ellos solofueron marionetas. — prosiguió Ewyine

—¡¿Marioneta?! — replicó Romel.

—¿De quién? — preguntó él.

—El bando de hechiceros maligno, autodenominado la orden oculta del sol negro.— tomó la palabra Anabell.

—Ellos han estado robando las armas místicas de varios reinos. — comentó.

—Tal parece que quieren apoderarse de todas. — añadió.

—No puede ser... — profirió Romel con preocupación.

—Hay algo más. — anunció Ewyine.

—Tal parece que ellos tienen algo que ver con la peste que se a esparcido por los reinos. — mencionó.

El rey tuvo que sentarse un momento, escuchar todo eso no le hizo bien.

—¿Cómo sabían cuando robar el arma que protegían aquí? — cuestionó Jacob.

Todos los presente en ese momento se miraron entre sí, de pronto se dieron cuenta que era demasiado conveniente para ellos todo lo sucedido como para que fuera una gran coincidencia.