DEMANGEL© (libro #1 Finalizado)

CAPITULO 23: "ABISMO".

Antes de iniciar este capítulo quiero dar las gracias a todos los que me han apoyado y han leído mi obra la cual les he compartido con mucha ilusión.

espero que lo que les he compartido por el momento les haya gustado, ahora quiero compartirles lo siguiente qué es esto, este es el último capítulo de este libro más no es el final de esta historia aún falta mucho por mostrar, tengo mucho que ofrecer asi que seguire con esto por que lo disfruto mucho!!

 Sin más que decir... espero que lo disfruten; un saludo a tod@s y nos estamos leyendo ;)

Después de un día y ocho horas de viaje llegan al lugar, el pequeño pueblo de Ravaca, era un lugar muy tranquilo, los habitantes parecían muy cálidos entre sí.

—Vamos, será mejor que busquemos una taberna donde comer y beber algo. — dijo Ewyine.

—Sí y luego una posada donde bañarnos y descansar como se debe. — agregó Anabell.

—¡Ah! Extranjeros. — dijo un hombre que se puso en medio de su camino.

—¡Eh! ¿Quién eres tú? — espetó Anabell con un tono despectivo.

—Mi nombre es Baltasar. — dijo aquel individuo, de apariencia descuidada y algo pasado de peso.

—Y por unas cuantas monedas, podría ayudarles a encontrar un lugar donde podrán tener todas las comodidades que necesitan y a un buen precio. — agregó de manera oportunista.

—No lo sé... — expresó Ewyine.

—No te conocemos ¿Por qué confiaríamos en ti? — añadió él.

—Bueno... en primer lugar porque son extranjeros... y no conocen la zona, además necesito las monedas, llevo tres días sin comer. — comentó aquel hombre.

—De acuerdo... tus ganas. — respondió Ewyine con una pequeña sonrisa en su rostro.

—Guianos. — espetó.

—¡Claro! — voceó Baltasar.

El hombre comenzó a caminar y los demás lo siguieron en el carruaje hasta una taberna llamada el colmillo de lobo.

Allí Jacob y sus amigos se adentraron, una vez dentro le dieron unas cuantas monedas a Baltasar, el cual fue a toda prisa para gastarlas en alcohol.

—Típico, no era más que un borracho oportunista. — dijo Anabell.

—Se veía venir... — espetó Jacob con decepción.

—En fin, busquemos donde sentarnos y compremos algo de comer. — enunció Limer.

De esta manera fueron y se sentaron en una mesa que quedaba en el fondo junto a una de las esquinas del lugar. seguidamente Ewyine y Limer se dirigieron a comprar la comida, la cual consistía en Costillas de cerdo, un guisado picante, pan sin levadura, frutas y para beber cerveza de raíz y pulpa de fruta para Jacob.

Mientras todos comían y se relajaban, Jacob le preguntó a Limer sobre cómo llegó a convertirse en el hechicero real.

—Bueno es una historia de hace muchos años... — le respondió él de manera esquiva.

—Por favor dígame. —suplicó Jacob con gran curiosidad.

—Enserio no es la gran cosa. — dijo Limer.

—Inicie a temprana edad en la magia, en el reino de Maipas. — comentó reclinándose en el respaldar del asiento y cruzándose de brazos.

—Era un joven muy talentoso, para ser franco. — agregó.