Capitulo 22 parte 2

7.4K 350 54
                                    

Moví mis piernas todo lo que pude para pegarle en las bolas pero era anatómicamente posible porque mis piernas resultaban demasiado cortas, mordí su hombro dos veces pero luego me dio asco pensar en que quizás era un vagabundo y dejé de hacerlo, mis brazos golpeaban su espalda y nada de eso parecía detenerlo. Lo peor de todo era que el hombre se había metido entre calles solitarias y no había nadie aparente que escuchara mis gritos y viniera a ayudarme.


—Por favor, por favor no me haga nada —rogué llorando cuando me di cuenta de que no iba a poder hacer nada por mí misma. El tipo soltó una risa sin mucha gracia y me acomodó en su hombro.


—No te voy a hacer nada, entiéndelo. Sólo quiero ayudarte —murmuró, de una manera muy creíble, pero yo no era tan ingenua— mi hermano trató de suicidarse también, hace un año, y lo llevé a este lugar justo como te estoy llevando a ti, pero lo ayudaron.


—¡QUE YO NO ME QUERÍA SUICIDAR! —grité cansada y gemí de frustración— y aunque lo hubiera tratado, cayéndome del puente no hubiera podido.


—No por el golpe pero por el agua. Te daría hipotermia en un segundo y te ahogarías. La negación es el primer paso, lindura.


—¡NO ME LLAME LINDURA, VIEJO VIOLADOR! ¡Y NO ESTOY EN LA MALDITA NEGACIÓN!


—No soy un viejo y mucho menos violador, por dios santo —se burló y dio vuelta a la calle— estoy seguro que a los 26 aun no cuento como viejo, niña. Y jamás sería un violador.


—No me interesa cuantos años tienes, me das miedo y no te creo nada. Me estás llevando en tu hombro a no sé donde a hacerme no sé que cosas. Mi novia se va a desesperar y tengo que ir por mis hijos —dije, con la voz completamente cortada al final y luego comencé a llorar, por un montón de cosas.


Se suponía que hoy sería mi día especial. Mi día de descanso de los niños. Mi cita con Lauren . Mi segunda primera vez. Se supone que este día sería todo bonito y terminaría todo perfecto. Pero empezó siendo un maldito desastre y terminó conmigo siendo llevada en el hombro de un tipo hacia un manicomio o hacia un baldío abandonado.


—Eres muy chica para tener hijos —masculló el tipo— ¿también estás drogada? ¿Te imaginas a tus hijos y a tu novia, por eso te querías matar, porque no tienes nada de lo que quieres?


—¡¿POR QUÉ NO PUEDES ENTENDER?! —le grité entre lagrimas. Mi garganta ardió y el tipo gimió ante mi voz destruyendo su tímpano— NO ME QUERÍA MATAR. TENGO NOVIA Y DOS HIJOS. ESTOY PERFECTA. SOY NORMAL Y FELIZ. NO TENGO NINGUN MALDITO TRAUMA. Y NO ESTOY JODIDAMENTE DROGADA.

—El odio hacia tu ayudante es una de las fases, pronto pasarás por la resignación, luego negociaremos y finalmente pasaras por la aceptación. Y quizás después de ser curada y estar limpia de drogas, puedas conseguir novia e hijos.


—Por el amor de dios —murmuré, más allá de lo frustrada. Este hombre no podía ser más estúpido, de verdad. Y sus malditas palabras eran tan suaves y calmadas que en poco tiempo yo misma iba a empezar a creer que me quería matar de verdad y que estaba inventando a Lauren y a mis hijos.

Real life, Real love (segunda temporada de TPBL) Adaptación camren G!PDonde viven las historias. Descúbrelo ahora