Lagunas ; Quackity | Karmaland & DSMP |

Capítulo 19. Exploración bajo la luna brillante

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La sanción de Quackity llegó a su fin y con ello la del resto de sus compañeros. Para sorpresa de muchos, a excepción del grupo de híbridos, Rubius se recuperó mucho más rápido de lo que una persona al borde de la muerte haría, entonces fue dado de alta casi al mismo tiempo que la liberación de Quackity. Las semanas habían pasado y el tema se enfrió, únicamente quedaban los rastros de incomodidad por parte de los guerreros, al volver a las calles después de un tiempo de inactividad.

Al volver, tuvieron mucho trabajo, pues al nadie hacer lo que ellos hacían, se acumularon varios problemas, como el regreso de animales salvajes rondando por la zona, el incremento de monstruos a las orillas del pueblo y la disminución de la fuerza de algunos hechizos. De alguna forma, todo el equipo funcionaba con sus once miembros, tenían un balance y organización, pero cuando repentinamente parte del equipo quedó ausente (ya sea por las sanciones u ocuparse de su propio negocio, como Illojuan y Mangel), el trabajo aumentó para los que quedaban, bajando el rendimiento ante el exceso de encargos.

Aunque a Illojuan le sudó completamente lo de volver a las actividades de guerrero para mantener su local, todavía decidió proteger la zona donde se encontraba el Chiringuito, ya que con la ausencia de Vegetta y su magia, el pueblo volvía a ser inestable. La mayoría le lloró a su líder esas semanas, valorando mucho más su trabajo.

Poco después de que la situación se controlara y tuvieran un respiro tras el regreso del resto de miembros, la mayoría ya se encontraba en el Chiringuito de Illojuan (su nuevo punto de reunión favorito) ya que allí si había descuentos para ellos... A excepción de Quackity y Rubius, ellos en ocasiones tenían que pagar de más.

—Aquí tienes, espero que mi deuda vaya disminuyendo— Rubius dejó una pesada bolsa con karmacoins sobre la barra, frente a Illojuan. —Estoy jodidamente cansado de trabajar de más—

—También puedes disminuir la cifra de tu deuda trabajando gratis en el Chiringuito—

—Podré trabajar para otros, pero no para ti— gruñó por lo bajo.

Rubius ha estado teniendo trabajos extras para pagar lo que debía a Illojuan. A pesar de que todavía no estaba completamente estable en su salud, se forzaba ante la insistencia de Merlon, quien lo sobrecargó de actividades de guerrero sin paga. Ayudaba en locales del pueblo para conseguir dinero, incluso en el pequeño restaurante de la amiga de Quackity, ya que el pequeño local pudo atraer más clientes después de haberlo vestido con un traje de maid para atender.

—¡Brindo por la liberación de los chicos y la recuperación de Rubius!— exclamó Staxx, chocando su tarro de cerveza con el de sus compañeros y tomando la bebida como si fuese simple agua.

—¿No quieres tomar, Quackity? No creo que Staxx te lo impida esta vez— preguntó Willy, mirando al chico a su lado.

—No tengo ganas, prefiero algo como una limonada— dijo, mirando a la barra.

—Tu puta madre te va a servir la limonada— Juan no levantó la mirada de las monedas que estaba contando, pero Mangel fue a encargarse del pedido de Quackity.

El local cerró temprano ya que el grupo de guerreros se había adueñado de él. Apenas las estrellas comenzaban a aparecer en el cielo y la gente regresaba a sus casas pronto, debido a que la seguridad en Karmaland disminuyó; aunque fue regulada, no querían arriesgarse, incluso si esa noche la luna brillaba en lo alto en un cielo despejado, ahuyentando a las criaturas.

Aprovechando el día del mes, donde la luna brillaba dándoles un descanso, se encontraban de fiesta en el Chiringuito, únicamente sin Vegetta y Lolito, ellos debían estar ocupados en otros asuntos.