Eres Mi Destino

Cap. 14

Los meses pasaron y durante este tiempo, Charly se dedicó a cuidar de Yeimy y de su hijo, hasta llegar a este momento. Faltaban pocos días para que el bebé naciera, así que los cuidados de Charly hacia Yeimy eran más. Ahora, ambos se encontraban saliendo de su casa, para dirigirse al lugar en dónde iba a ser la celebración de su boda, verlo y verificar que todos los detalles estuvieran en orden.

- Charly, yo puedo caminar sola, no te preocupes – Dijo, apartando el brazo del que Charly la estaba sosteniendo.

- Déjate consentir.

- Ajá, pero estoy embarazada no inválida o enferma – Charly giró los ojos y abrió la puerta del copiloto para que Yeimy entrara, luego rodeó el auto y abrió la puerta del conductor para entrar él. Se vio en el espejo retrovisor y acomodó su cabello.

- Debería tintarmelo en rubio.

- Ah entonces yo me lo tiño en negro… Dejá de pensar bobadas y pisa eso que vamos a llegar tarde.

- Faltan veinte minutos, bájale dos cambios.

- La hacienda queda a media hora de aquí, Charly.

- ¿Es una hacienda?

- Ay… Dios dame paciencia para no quitarle lo caribonito – Dijo, cubriendo su cara con su mano.

- En ningún momento David me dijo que era una hacienda.

- Enseñá – Charly toma su celular y entra al chat del planificador, y busca un mensaje en específico.

- ¿Ves?, Solo me envió la ubicación.

- Bueno pues a mí sí me dijo.

- A vos, a mí no.

- Dale pues, arrancá – Charly encendió el motor, haciendo que también se prendiera la radio, en la que se reprodujo una canción ya comenzada.

Yeimy frunció el seño y cambió de estación, hasta que encontró una que estaba emitiendo una de las canciones de Charly y subió el volumen. Sonrió, cuando sintió pequeños golpecitos en su pancita, los que eran pataditas.

- ¿Qué pasó mi amor? – Preguntó, acariciando su pancita.

- ¿Se movió de nuevo?

- Si, ha estado muy inquieto hoy.

-Ese va a ser futbolista.

- No lo dudo.

- Le encantan las canciones del papá.

- Le encanta el papá, todos tus hijos te prefieren a vos.

- Erik no, Erik te prefiere a vos.

- En parte… - Ladeó su cabeza, encogiéndose de hombros.

Giró su cabeza a la ventana y vio el pasar de las nubes por el cielo azul, mientras acariciaba su barriguita. Pasaron los minutos y sintió como Charly aparcaba la camioneta a un lado del lugar.

- Llegamos.

- ¿No te pudiste estacionar más cerca?

- Lo iba a hacer pero me iban a pedir que moviera la camioneta de todos modos.

- Los pies me pesan – Dijo, quejándose, mientras se bajaba del auto. Charly observó todo su cuerpo, que andaba delate de él a paso lento.

- Que sexy te ves con pancita y vestido – Yeimy volvió su cabeza, con una ceja enarcada.

- ¿Ah, sí?

- Ujum – La tomó de la cintura, acercando su cuerpo.

Ella sonrió, mientras su vista se centraba en el camino que iba recorriendo. Entraron a la hacienda, se encontraron con un hermoso y amplio jardín con una fuente en el centro. Árboles y plantas adornaban el lugar, antes de entrar a la hacienda.