Cap. 20

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Años después.

Yeimy y Charly dormían plácidamente sobre la cama hasta que sintieron un movimiento brusco en el colchón y ambos se despertaron abruptamente, viendo a Sebastián saltando en la cama.

—¿Qué pasó?— Preguntó Yeimy con pereza.

—¿Saben qué día es hoy?— Dijo el pequeño con emoción poniéndose de rodillas frente a ellos.

—¿Algún día de diciembre?— Respondió Charly confuso.

—Hoy es Navidad.

—¿Qué? Según yo estábamos empezando mes— Sebastián sacudió la cabeza en forma de negación mientras sostenía una figurita de un Leo Messi  en su mano.

—Bueno, a bañarse entonces.

—Noo— El niño corrió de los brazos de Yeimy pero ella lo sujetó antes de que bajara de la cama y comenzó a hacerle cosquillas.

—No señorito, a bañarse. Vamos.

Yeimy y Charly llevaron a su hijo al baño y ella le quitó la pijama con estampados de Avengers mientras que Charly preparaba la bañera.

—Listo campeón.

—Yo no me quiero bañar— Dijo con una carita de enfado mientras lo metían a la bañera.

—¿Querés lucir la ropa que te compramos para Navidad?

—Sí.

—Entonces te tenés que bañar, porque sino no se puede, ¿Está bien?.

Yeimy salió del baño de su hijo para dirigirse al baño que estaba en su habitación y ducharse. Cuando salió se colocó una bata y comenzó a arreglar su cabello que había dejado crecer para después ponerse un jean y un suéter gris por mientras transcurría el día.

Bajó a la cocina pasando por la sala de estar donde estaba un árbol gigantesco con luces, adornos y esferas navideñas, algunas con fotografías familiares, junto con la estrella en la cima. Comenzó a hacer panqueques y para su hijo unos en forma de reno acompañados de frutas.

—¿No se te quemaron los panqueques?— Dijo Charly entrando con Sebastián sobre los hombros .

—De algo sirvieron los cursos de cocina.

—By Charly Flow.

—¿Panqueques?— Indagó Sebastián acercándose a la estufa.

—Si, pero cuidado te me quemas con algo, no queremos accidentes en mero 24.

—¿Ya lo viste?— Dijo señalando a su hijo y ella se volvió hacia él, viendo que llevaba una sudadera color verde azulado con unos pantalones cortos del mismo color, una gorra blanca y tenis blancos, junto con una cadena con su nombre de diamantes.

—¡Que guapura, Dios mío!— Lo alzó en brazos y le dio un beso en la frente —Y lo de tener a los Reyes del Flow como papás no está de adorno, mirá esa pinta.

—Estoy guapo, lo sé.

—Ay, Dios mío, la fotocopia de Charly— Dijo dejándolo sobre la encimera.

—¿Te puedo ayudar?

—Mezcla esto pero sin mancharte, por favor— Le dio un bowl a su hijo y él comenzó a batir la mezcla con un tenedor, hasta que metió un dedo y se lo echó a la boca.

—Sabe dulce.

—Te lo estás comiendo.

—Me ofende que dudes de mí de esa manera— Se hizo el indignado, hasta que Yeimy le embarró el labio de la mezcla.

Eres Mi DestinoWhere stories live. Discover now