Donde el agua y la tierra se encuentran (Namor x Shuri)

Capítulo 8 - 🔥Caer conmigo mientras te aprecio 🔥🔥😏😈🔥🔥

Notas del autor:

Bueno... Momento hot 🔥 jajaja que les digo este cap surgió en la idea de que pasaría si Namor y Shuri se dieran unos buenos besotes y algo más que una tensión sexual <3

Momento hot 🔥🔥🔥😏😈

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Ambos entran al laboratorio ella enfadada, mientras que Namor contemplaba la sala, las mesas, las creaciones.

Estaba vacío, su refugio, era hora del almuerzo y antes de entrar dio un mensaje que nadie la molestara, tenía que relajarse tenía muchas tensiones que pasaban por su mente.

Namor entraba riéndose en parte, había intentado notoriamente coquetear con ella toda la tarde, lo que duró el consejo, aún cuando ella se seguía negando a caer ante él.

Siendo más irrespetuoso ante la reunión del Consejo, ella le lanzaba mirada de desaprobación mientras que él no podía dejar de mirarla.

Namora tuvo que pellizcar el hombro del Rey en más de una ocasión gruñendo al oído que se detuviera.

—Quizás no eres evidente para ellos, pero para nosotros hasta tu olor declara cuánto es lo que quieres llevártela de acá y hacer lo que quieras... Solo escúchame primo... Sea lo que sea que hagas, que no sea cerca de la delegación Talokanil. —Namora irritada y enfadada, le reclamaba, todo lo que mostraba Namor era cuanto quería estar cerca de la Reina.

Namor soltó una risa jactante, llamando la atención del consejo, más aún de la Reina sentada en el trono, que alzaba una de sus cejas mientras pasaba su mirada desde Namora a Namor.

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Otro vestido la adornaba uno color negro con púrpura, hermoso al tacto, con transparencia en la cintura y en su cuello, ceñido a su cintura dándole una buena forma, liso y en forma triangular irregular desde la altura de sus rodillas hsta sus pantorrillas.

Accesorios de vibranium oscuro, con joyas de oro acompañando en su cuello, brazaletes en sus brazos y pulseras en sus muñecas, unos pendientes largos que tintinean ante el movimiento, su collar de pantera sobre sus clavículas.

Una diadema tenue sobre su frente, una corona recatada para todo el vestuario que portaba, su cabello corto y peinado, con pequeños broches de vibranium.

Desde que la había visto quería tocarla, abrazarla, mantenerla cerca de él, acunarla y no soltarla.

—¿Qué te preocupa Reina?

Aunque le preguntara en realidad estaba atendo a ella, a sus movimientos, como leía y ojeaba documentos sin importancia para él.

—¿Qué lees mi Reina? —decía mientras se acercaba mirándola con suavidad.

La miraba atentamente mientras ella hablaba de sus preocupaciones, deseos y de su futuro.

Le molestaba la piedad que aún su pueblo podía mostrar...
Wakanda... Para él todo se resolvería si tan solo sus gobernantes fueran más dominantes, si mostraran su poder.

Lo que él haría por proteger esta tierra si Shuri se lo pidiera, dejaría a la superficie en llamas, aún cuando ella le había dicho tiempo atrás que no lo permitiría.

—Me atraes tú —deseo haber podido decir.

Su laboratorio lo maravillaba, lo ilusionaba y encantaba como un niño, deseaba saber más, que era capaz ella de hacer, de lograr.

Pero algo lo molestaba, el saber que dejaba libre a los que le intentaban hacer daño, el quemaría el mundo por ella, le serviría las cenizas del mundo en una charola si ella quisiera.